La asociación AEA ha indicado que en nuestro país existen 270 kilómetros de carreteras con un índice de peligrosidad diez veces superior a la media
Las cifras de siniestralidad en carretera, según los datos de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), están disminuyendo en los últimos años, aunque todavía siguen existiendo muchos “puntos negros” que hacen que hayan repuntado en 2024. Es decir, aquellas zonas con una alta concentración de accidentes.
AEA indica en el informe que de los 165.995 kilómetros de carreteras que tenemos actualmente en nuestro país, el 26.490 son gestionados por la Administración Central. Acumulan el 53% del tráfico diario. Otros 71.522 tienen titularidad autonómica. Se concentra el 42% de la circulación. Mientras que los 67.983 kilómetros pertenecen a Diputaciones o Cabildos.
Desde AEA lo que han analizado ha sido el periodo entre 2018 y 2022, tomando como referencia los datos proporcionados por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, señala la web Autopista.
De ahí han obtenido un Índice de Peligrosidad Medio (IPM). Disminuyó en un 2,4% comparado con los cinco años anteriores.
Pero todavía existen “demasiados” puntos negros en los que se debería trabajar para reducir el número de accidentes. Para diferenciar cuáles son puntos negros del resto, desde AEA han establecido que como mínimo deberían tener un IPM de 82 puntos o más. Es una cifra diez veces superior a media de todo el territorio nacional.
Los tramos de carretera más peligrosos
El informe habla en primer lugar de las carreteras convencionales, en las que la DGT ha puesto mucho foco en los últimos años para reducir su siniestralidad.
El tramo más peligroso está localizado en la provincia de Jaén, en concreto entre los kilómetros 252 y 255 de la N-4a con un IPM que supera en 198 veces al de la media nacional.
Aunque en realidad para encontrar el tramo con más accidentes y víctimas de toda España tenemos que pasar a una autovía. En concreto es la A77a, en el kilómetro 0 situado en Alicante.
Autopistas y autovías
A este le siguen otros en la T-11 de Tarragona (km. 17) y el tercero en cuestión estaría en la A-55 (km. 12) a la altura de la localidad de Mos (Pontevedra).
La siguiente distinción la realizan con las autopistas de peaje, que según AEA son las “infraestructuras más seguras para circular”. En ellas han encontrado 75 tramos con IPM tres veces superior a la media. Se registraron 396 accidentes y 640 víctimas, la mayoría de carácter leve.
El que se lleva la palma es el kilómetro 52 de la AP-36, de la provincia de Toledo. Aunque el que más accidentes acumuló fue el kilómetro 14 de la B-23 de Barcelona. Pero el más numeroso en víctimas fue el km. 159 de la AP-9 de Pontevedra.








