La mujer sufrió una agresión sexual, pero ‘en ninguna de sus manifestaciones llegó a precisar cómo se percató de la identidad’ del hombre
El CGPJ ha comunicado este miércoles que las magistradas de la Audiencia Provincial de Teruel han absuelto a un hombre acusado de agresión sexual al observar relevantes incongruencias en las declaraciones de la denunciante.
A las incongruencias que citan las magistradas se une el hecho de que la mujer, en ninguna de sus declaraciones, la mujer llegó a precisar cómo llegó a percatarse de la identidad del hombre que le atacó por la espalda.
Según la sentencia, la mujer no despejó datos básicos para atribuir al denunciado la agresión sexual denunciada
Las magistradas afirmaron que, si bien el Tribunal “no pone en duda que la denunciante fue víctima de una agresión por parte de un individuo que la abordó por la espalda en la tarde del día 15 de septiembre de 2022”, también que las declaraciones de la mujer a lo largo del procedimiento “no han sido coincidentes en aspectos esenciales para la determinación de los hechos acaecidos y no han despejado datos que son básicos para atribuir al denunciado la agresión sexual denunciada”.
Además concluyen que la declaración la denunciante, la única prueba de cargo que han presentado las acusaciones, “se presenta como poco precisa, encontrándose huérfana de toda corroboración a través de datos objetivos que pudieran apoyarla”. Por ello entienden que “se hace imposible fundar una condena sobre la mera “creencia”, intuitiva e inexplicada”.
La víctima no explicó cómo supo la identidad del acusado de agresión
Las magistradas expresaron en la sentencia que, dadas las circunstancias en que se produjo la agresión, “según la denuncia de la Sra. “V” (la atacó) por la espalda, sin posibilidad de girar la cabeza por tener colocada la navaja en el cuello de forma que le impedía volverse, y huyendo del lugar cuando pudo zafarse, corriendo asustada y sollozando”.
La sentencia añade que la mujer declaró ante el juez instructor que cuando consiguió soltarse echó a correr, “no viendo si el agresor la seguía porque no se volvió”; sin embargo, en el plenario ha manifestado que “vio al agresor cuando huía”, que “no llegó a volverse hasta que huyó. (…) en ninguna de sus manifestaciones ha llegado a precisar cómo llegó a percatarse de su identidad”.
Por tanto, precisa el fallo, las declaraciones de la mujer llevaron al tribunal plantearse dudas razonables sobre el reconocimiento que la mujer hace de su agresor ya que “en ninguna de sus manifestaciones ha llegado a precisar cómo llegó a percatarse de su identidad”.