Un marroquí ilegal denunció la banda a la Policía, porque no le pagaron el dinero por asumir la condena por violencia de género falsa
La Policía Nacional ha desmantelado una red delictiva dedicada a regularizar la situación de mujeres extranjeras mediante la simulación de casos de violencia de género.
Los detenidos formaban parte de una red que orquestaba episodios ficticios de violencia de género para obtener permisos de residencia para las mujeres que se hacían pasar por víctimas. Los delincuentes pagaba hasta mil euros a varones magrebíes dispuestos a asumir condenas por maltrato.
La operación denominada “Casamenteros” se saldó con siete individuos arrestados en Granada y Almería, cuatro mujeres y tres hombres, acusados de denuncia falsa, simulación de delito, favorecimiento de la inmigración ilegal y pertenencia a una organización criminal.
La organización tenía la tarea de reclutar, tanto a mujeres que se beneficiarían de esta artimaña, como a posibles agresores. La banda focalizaba su búsqueda en ciudadanos marroquíes en situación ilegal en España.
La organización se descubrió por la denuncia de un marroquí ilegal al que la banda no le pagó el precio acordado
El inicio de la investigación tuvo lugar cuando un hombre denunció que le habían prometido 3.000 euros por protagonizar una falsa agresión física en público, pero nunca recibió el pago. Como resultado de la simulación, el hombre recibió una condena penal en un juicio rápido.
La investigación de esta denuncia condujo a la desarticulación de la organización criminal, que cobraba entre 4.000 y 6.000 euros a las mujeres que se hacían pasar por víctimas de violencia de género.
Además, los hombres seleccionados para realizar falsas agresiones físicas en lugares públicos recibían entre 500 y 1.000 euros, a cambio de asumir una condena judicial por violencia de género contra su supuesta pareja.
Envíos de dinero a Marruecos
Como parte del operativo, se llevaron a cabo dos registros domiciliarios en Gualchos (Granada) y El Ejido (Almería), donde se incautaron dinero en efectivo, documentos y recibos de envíos de dinero a Marruecos.
Un total de diez mujeres extranjeras obtuvieron fraudulentamente permisos de residencia legal tras someterse a juicios rápidos que las declaraban víctimas de violencia machista. Los permisos serán finalmente revocados.
Según informa EFE, el Juzgado de Motril, ha dictaminado que los siete detenidos no podrán abandonar el país, al menos mientras dure la investigación.