El sospechoso gritó “Alá es grande” mientras realizaba los disparos
La Guardia Civil detuvo el pasado sábado, a un hombre de origen sirio, que fue sorprendido tras intentar robar en un domicilio. Durante la detención, el arrestado sacó un arma de fuego corta y realizó dos disparos al grito de “Alá es grande”. Posteriormente, se comprobó que el arma era simulada. Aún así, dos agentes fueron heridos por la violencia extrema que empleó el sospechoso.
Cuatro agentes fueron necesarios para poder reducirle y los dos heridos, sufrieron lesiones en el ojo y hombro tras ser atacados con una plancha.
Los hechos se produjeron el pasado sábado por la tarde, en el entorno de la vereda de Tabala de la pedanía murciana de Alquerías. Los propietarios de una vivienda observaron a través de las cámaras de seguridad a varios encapuchados en el interior de su propiedad por lo que dieron aviso a la Guardia Civil. Dos dotaciones llegaron al lugar y localizaron a uno de los sospechosos.
Al verse sorprendido, sacó el arma de fogueo, realizó los disparos al grito de “Alá es grande” y se dedicó a agredir con violencia a los agentes. Tras la detención, se comprobó que el inmigrante sirio, había estado interno en una cárcel en Bélgica, que tenía varias requisitorias de diferentes juzgados en España y contaba con diversas identidades falsas.
El Vicepresidente de Murcia, José Ángel Antelo, ha exigido la deportación de todos los inmigrantes que hagan del delito su forma de vida.