‘Ha sido como negociar con El Corte Inglés’, afearon desde el comité de empresa tras acordar las indemnizaciones a los afectados por el ERE
Podemos, el partido que se autopercibe como feminista y obrero, ha despedido al 70% de su plantilla incluyendo en el ERE un 64% de mujeres, lejos de la paridad que pregona la formación. Culminado el expediente de regulación de empleo de Podemos, su estructura orgánica estatal quedará formada por un 82% de hombres y un 18% de mujeres.
El pasado lunes, 28 de agosto, concluyó la negociación iniciada a principios de mes. Finalmente, de los 105 trabajadores afectados por el ERE, se salvan salvan 28 de la sede central de Madrid. Se ha pactado el despido de 44 trabajadores de las sedes autonómicas y 30 de la central.
Según fuentes de partido, la ejecutiva decidió reducir la plantilla a los 28 trabajadores citados, 21 hombres y solo 7 mujeres, contradiciendo el Plan de Igualdad de los estatutos. Cabe destacar que el ERE incluye la salida del personal de la secretaría de igualdad y su desaparición del organigrama del partido.
‘Como negociar con El Corte Inglés’
Mención aparte merece el trato dispensado por la formación izquierdista a los trabajadores afectados. “Ha sido como negociar con El Corte Inglés”, lamentaron fuentes del comité de empresa que recogió La Vanguardia. Los representantes de los trabajadores lamentaron la dificultad planteada por Podemos a las indemnizaciones por despido a su personal.
Mientras los trabajadores afectados por el ERE pedían los 45 días por año trabajado, como defiende Podemos en su propaganda. Bien al contrario, finalmente recibirán 38 días, sólo 5 por encima de los previstos por la ley.
Podemos comenzó las conversaciones ofreciendo 20 días por año trabajado, pero el pasado lunes, 28 de agosto, se llegó al acuerdo final para ahorrarse pagar 13 días de nóminas, pues el plazo legal de las consultas con los trabajadores afectados terminaba el 9 de septiembre.
El autodenominado partido de “la gente” argumentó que los 20 días por año corresponden a los ERE por causas económicas objetivas (pérdida de ingresos por la debacle electoral del partido), y no los 33 días establecidos como límite en despidos improcedentes.