La pequeña Emily Vaquero fue secuestrada por su madre, ucraniana, como represalia contra el padre por iniciar los trámites de divorcio
Emily Vaquero, la niña de dos años de edad secuestrada por su madre en Zaragoza el pasado 19 de mayo, ha sido localizada por la Interpol en Ucrania. La madre secuestradora entró en Ucrania el 22 de mayo, solo tres días después de reportar el padre la desaparición de la niña.
La rapidez del viaje y la facilidad para entrar en un país en guerra indica que la secuestradora, la ucraniana Irina Palii, llevaba tiempo planeando la sustracción de la menor y su posterior huida.
La Interpol contactó con la la madre secuestradora
La Policía Nacional convocó el martes al padre de Emily, el investigador y docente en la Universidad de Zaragoza, Alejandro Vaquero, para informarle del hallazgo de la Interpol: que su ex pareja, de nacionalidad ucraniana, y a su hija entraron en Ucrania el pasado 22 de mayo.
Dentro de lo terrible de la noticia, el padre supo también que las autoridades lograron establecer comunicación con la madre y habían podido constatar, posiblemente mediante una videollamada, que Emily se encontraba “bien”.
El padre declaró al “Heraldo de Aragón” que la Policía no aportó detalles del paradero de la niña secuestrada por su madre o de la investigación en curso, a cargo de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM).
El progenitor de la niña secuestrada por su madre, aunque afectado por la noticia, mantuvo su confianza en la colaboración de las autoridades ucranianas, al tratarse de “una nación con garantías, que trabaja para unirse a la Unión Europea”, declaró.
Vaquero explicó que el primer paso consiste en iniciar lo que se conoce como un proceso de restitución, establecido en el convenio de La Haya (firmado tanto por España y Ucrania) en relación a la protección y sustracción de menores.
Sin embargo, el temor del padre radica en las dilaciones administrativas, quizás durante meses, con las dificultades añadidas de que el país está en guerra. Una nación, Ucrania, de la que “madres y niños están saliendo por el peligro que corren, no entrando“, argumentó el padre.
“Eso, además, si no se mueven de Ucrania”, añadió el padre de la menor sustraída. Se da la circunstancia que la madre y el hermano de la secuestradora Irina Palii residen en Crimea, territorio invadido y anexionado por Rusia en 2014.
SOS Desaparecidos denuncia la dejadez de las autoridades españolas
En una entrevista concedida a “El Cierre Digital”, Joaquín Amills, presidente de SOS Desaparecidos, ha señalado que: “No entendemos cómo ha podido ser que la madre haya cruzado la frontera con Emily, nos parece que ha habido falta de colaboración”.
“Veníamos diciendo desde el minuto uno que temíamos que cruzara fronteras y saliera de España, lo que demuestra lentitud por parte de nuestro país. Que hayan cruzado la frontera complica todo bastante, esperamos que se tramiten las órdenes oportunas a través de la Unidad Central y el convenio de la Haya”, añadió Joaquín Amills.
“Creo que tanto el Ministerio de Justicia como el Ministerio de Exteriores tendrán que hacer valer los derechos de Emily, que es una ciudadana española, en línea con las resoluciones judiciales previas sobre el caso. Habrá que razonar el buen entendimiento de Ucrania con España y confiar en ello”, dijo Joaquín Amills.
“Ahora queda aguardar a que se ordene la busca y captura de Iryna, la madre de Emily, y confiar en que las autoridades ucranianas hagan caso a la legislación española”, concluyó el presidente de SOS Desaparecidos.
El padre de la niña secuestrada por su madre recurrió a la citada organización, además de a la Policía, en cuanto descubrió la sustracción de la menor.