Los integrantes de ‘Hablamos Español’ reciben amenazas de nacionalistas violentos por publicitar carteles con topónimos en español
La asociación Hablamos Español ha instalado varias vallas publicitarias para reivindicar la oficialidad de los topónimos españoles allá donde el fanatismo nacionalista los reemplaza por nombres geográficos alternativos, con el único fin de expulsar el español lo que consideran su feudo.
Según una nota de prensa emitida por Hablamos Español, la valla que recordaba algo tan obvio, como que Sangenjo se dice Sanxenxo en gallego, acabó ayer martes arrancada en menos de dos horas.
“Tras lograr que nuestros nombres de lugares en español desparezcan de la vida oficial, también quieren prohibirnos usarlos libremente en nuestra vida privada e intentan coaccionarnos para que no podamos hacer campañas reivindicativas con nuestro dinero”, advirtió la asociación.
Campaña de amenazas a la directora y portavoz de ‘Hablamos Español’
La asociación ha puesto a trabajar al respecto a su equipo jurídico, ante una nueva muestra del matonismo nacionalista. Según señala la nota, “desde ayer la presidente de Hablamos Español, Gloria Lago, está recibiendo amenazas e insultos por teléfono y también llegan mensajes degradantes al teléfono de la asociación”.
La empresa Alcampo, propietaria del terreno donde se ubicaba el cartel, cedió ante el acoso, las amenazas y en chantaje de entidades nacionalistas hispanófobas. Sin avisar a la empresa de publicidad propietaria de la valla, ni a Hablamos Español, simplemente se procedió a arrancar la lona y a destruirla.
La campaña a favor de los topónimos oficiales en español se realiza gracias a los donativos de colaboradores de todo el país, quienes reciben como agradecimiento a su aportación un ejemplar del libro “El robo de los nombres de nuestros pueblos. La sinrazón de la toponimia en España”.
El libro, redactado por seis expertos en toponimia, desmonta la farsa nacionalista a cuenta de los nombres geográficos.
¿Qué es y qué reivindica Hablamos Español?
Hablamos Español es una asociación apartidista sin fines de lucro, constituida por personas de toda España, nacida para salvaguardar los derechos lingüísticos de los hispanohablantes. La asociación propone políticas lingüísticas equiparables a las de los países con múltiples lenguas cooficiales, es decir, basada en la libertad de elección de lengua.
Hablamos Español propugna una política que ponga en el centro los derechos de las personas, sin que estas se subordinen a las lenguas. La presidenta y portavoz de Hablamos Español es la filóloga gallega, Gloria Lago.
Entre los objetivos de Hablamos Español destacan los siguientes:
- Que se pueda estudiar en idioma español como lengua vehicular en toda España.
- Administración bilingüe. Que el español esté presente en la atención médica, edificios gubernamentales, documentos, información turística, señales de tráfico, etc., de toda España.
- Que vuelvan a tener carácter oficial los topónimos en español con una tradición histórica, eliminados malintencionadamente por el nacionalismo lingüístico.
- No privilegiar el uso de un idioma sobre la competencia profesional. Que ser hablante de español no sea obstáculo para viajar, mudarse u opositar a la administración pública de cualquier parte de España.
- Que se pueda rotular un negocio particular en el idioma que elija el propietario, sin recibir multas por usar el español.
- Apertura de la cultura a los creadores en ambos idiomas. Que no se aborte la creación cultural en español en las Comunidades españolas bilingües debido a las ayudas exclusivas a creadores que no utilicen el español.
junio 30, 2023 @ 1:24 am
Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa. España no es Sudamérica, y el español que se habla en España no es el que ha al sur del Río Grande.
junio 30, 2023 @ 1:34 am
Y no es necesariamente “nacionalismo hispanófobo”. Para los gallegos la lengua gallega es tan natural como el “asento andalú” para un sevillano. Para un gallego hablar gallego es como El Rocío: es nuestra forma de ser genuinamente españoles. Y cambiar los topónimos nos duele, si bien casos como el de La Coruña u Orense (que viene de Aurum, Oro u Ouro) son menos sangrantes que el de Sanxenxo. Y no hay nacionalismo detrás.
En la Feria de Sevilla se oye flamenco, sevillanas y no sardanas, y a nadie se le ocurre decir que sea una feria nacionalista hispanófoba.