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19 SEGUNDOS

19 segundos. Eso es lo que dura uno de los últimos vídeos de Doña Insisto, a quien muchos
conocerán como Irene Mentiras, la marquesa de Galapagar o esa que va denunciando a
quienes componen poemas. 19 segundos, pero como habla como tricotosa enfurecida, le da
tiempo a hilvanar cosas como gymbros e incels, que son conceptos que usa de forma despectiva
para que no se le note el berrinche que tiene encima.

¿Y por qué se cabrea la nena? ¡Vaya usted a saber! Puede que su periplo en Todo es Mentira no esté siendo tan espectacular como
imaginaba; quizás en casa las cosas estén tensas por motivos de trabajo -ironía modo on-, o
puede que con el ajetreo de ser eurodiputada ya no vea tantas series en Filmin.

El verdadero motivo de su infinito malestar interior nunca lo sabremos, pero lo que sí podemos saber,
escuchando ese video de 19 segundos, es que Irene utiliza el mismo tonito despectivo,
condescendiente e hiriente contra el que ella misma finge luchar para meter en verdea a los
machirulos.

Que Doña Insisto vea mal que alguien entienda el gimnasio como una pasión, dista mucho de
ser coherente con su defensa a quienes, dentro de sus mismas coordenadas ideológicas,
también demuestran semejante pasión para, por ejemplo, desayunarse la copa menstrual. Y
que la tricotosa se mofe de los incels tampoco se adapta del todo bien a su discurso de
aceptación sexual y blablablá.


A estas alturas usted se estará preguntando qué ha pasado, ¿por qué ha saltado esta vez la
eurodiputada más capacitada de España? ¿Qué ha sido lo que le ha hecho ponerse en modo
fiera? Pues le trascribo su mensaje y luego le comento:

En la esquina superior izquierda del vídeo aparece la captura de un comentario en donde
podemos leer lo siguiente: “Responde al comentario de Pablo RR: 4 letras”. Nada más empezar
el vídeo, el cámara le comenta: “Irene, te han vuelto a decir lo de las 4 letras en Tik Tok, diles
algo”. Y entonces Irene, que venía caminando por un pasillo como si nada mientras fingía
revisar su móvil, dice lo siguiente: “A ver, gymbros, incels, por favor, dejar de gastar la vida en
comentar publicaciones de vídeos de mujeres en Tik Tok, haced cualquier otra cosa, es que nos
da igual lo que penséis de nosotras”.


Y claro, aquí, lo de que una imagen vale más de mil palabras viene ni que pintado, porque por
más que me empeñe, no voy a ser capaz de describir el gesto con el que Dona Insisto nos
enseña a ser hombres. Aunque quizás sea mejor así, no vaya a ser que lo describa tan bien
que hasta les haga vomitar.


Sobre el comentario de Irene, la pregunta más evidente que me viene a la cabeza es la
siguiente: si tan poco os importa lo que pensemos, ¿por qué habéis montado un partido político
con el que chupar del frasco mientras criminalizáis al hombre precisamente por sus
pensamientos? Y con respecto a las formas, a los gestos y a sus desprecios, lo que me
apetece hacer ahora mismo es recordarle que no está muy bien visto eso de dar buenos
consejos cuando se viene de malos ejemplos. Pero claro, curarle la hipocresía a un
podemonguer es pedirle peras al olmo, y a eso todavía no hemos llegado por mucha
inteligencia artificial que nos invada.

P.S.: Lo de las “4 letras” lo dejo a su maravillosa -y casi siempre enfermiza, pero acertada-
imaginación. Un besico.

4 Comments

  1. Cristian Martín
    Dom 26 enero 2025 @ 23:52

    Grande Will, espectacular artículo de opinión y muy ingeniosa esa reflexión de la inteligencia artificial.

  2. Alvaro Garcia Gonzalez
    Mar 28 enero 2025 @ 12:26

    Menuda nos ha caido con gente como Irene.

  3. VICTOR ARAGONESES
    Mar 28 enero 2025 @ 20:02

    Irene Montero la Menestra que tiene viviendas en Avila, pero que no dice si las usa para ayudas sociales a personas de bajo perfil social.

    Y por otro lado tengo una propuesta para que el Fraudillo sea investigado mediante una propuesta llamada Mocion de Censura Ciudadana

    https://www.change.org/p/moci%C3%B3n-de-censura-ciudadana-al-gobierno-espa%C3%B1ol?source_location=search

  4. José Manuel Nieto Sánchez
    Vie 31 enero 2025 @ 10:55

    Esepramos ver más artículos tuyos, Will. ¡Un saludo!

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