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El líder socialista gallego recoge cable y confiesa que sabía desde octubre las acusaciones de acoso contra Tomé

Gómez Besteiro cambia su trola inicial y admite que una tercera persona le informó hace meses de una ‘posible víctima’ del expresidente de la Diputación de Lugo

Ejemplo práctico de lo que ocurre cuando no se denuncian presuntos delitos a la Policía, y en su lugar se recurre al aparato del partido. José Ramón Gómez Besteiro, secretario general del PSdeG y portavoz socialista en el Parlamento de Galicia, reconoció este viernes que supo en octubre de las acusaciones de presunto acoso sexual contra el expresidente de la Diputación de Lugo, José Tomé. Primero negó conocer el caso.

Cuando el escándalo estalló, recuerda El Debate, Besteiro negó tener cualquier información. «No me consta ninguna denuncia, ni de ninguna compañera, ni del partido ni fuera de él», declaró entonces. Además afirmó que, de haberlo sabido, habría actuado de inmediato: «Si hay denuncia, nosotros somos inflexibles en la aplicación de nuestros protocolos».

El cabecilla socialista gallego explicó hoy que una tercera persona le habló en octubre de una «posible víctima», pero esa persona no presentó denuncia formal hasta esta misma semana. Con ese argumentario, Besteiro explicó que el partido no actuó, a pesar del aviso de que podía tener entre sus filas a un presunto acosador, casualmente un alto cargo de la formación.

Conocía la existencia de una ‘posible víctima’, pero no actuó al no haber denuncia

Al menos seis compañeras del partido señalan al exdirigente por, presuntamente, perpetrar semejantes actos, similares a los que han sacudido estos días el partido de hombres que «son feministas, porque son socialistas«, como defendió el hoy defenestrado José Luis Ábalos.

El PSdeG fabula hoy que reaccionó con rapidez una vez que la denuncia entró por el canal interno. «El partido no miró para otro lado», aseguró Besteiro ante los periodistas. El mismo día que recibieron la denuncia formal pidieron a José Tomé que dimitiera de todos sus cargos institucionales y orgánicos.

Esta intervención marca la primera aparición pública de Besteiro desde que estalló el escándalo de acoso sexual en el seno del partido en Galicia. Sin embargo, la escenificación de control de daños estaba aderezada con la dimisión de la responsable de Igualdad del partido en Galicia, Silvia Fraga, en protesta de que la ignorasen.

El motín del exdirigente denunciado

Para aumentar el esperpento socialista, el denunciado, José Tomé, renunció a sus cargos en el partido, pero se queda en la alcaldía de Monforte de Lemos y el escaño de diputado provincial, donde pasa a actuar como no adscrito, para restituir su «honradez y su honor».

«Soy totalmente inocente, tardará tiempo, pero se sabrá la verdad», declaró Tomé a El Progreso de Lugo, quien añadió que no guarda rencores . «Es evidente que es un montaje, a qué obedece no lo sé», dijo al citado medio, para también deslizar que podría haber fuego amigo.

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