Alfonso Serrano (PP): ‘Está en juego la democracia si permitimos que siga un Gobierno que es capaz de fagocitar todos los poderes del Estado’
El secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, ha denunciado este viernes el acoso a una concejal de su partido en Pozuelo de Alarcón por ser la hija del juez que admitió a trámite la querella contra Begoña Gómez.
El dirigente local del PP acusó directamente al PSOE de facilitar «dirección y teléfono» de la mujer, porque «su delito es ser la hija de un juez que ha osado admitir a trámite una querella contra la mujer del presidente del Gobierno».
Serrano afeó al PSOE que exija «respeto» para Gómez y a la vez «señale» a esta edil por ser hija del juez Peinado. Del mismo modo, criticó que Sánchez trate con «puño de hierro» a la presidenta madrileña, pero a lla vez tenga «mandíbula de cristal» cuando apenas roza el caso a su esposa, la cual sí vive «en una casa pagada por todos».
Tal como recoge ‘The Objective’ Serrano calificó de «hipócrita» la desaparición de Sánchez para ‘reflexionar’, porque Ayuso «se hubiera cogido un año sabático» de tomarse cinco días libres por cada procedimiento judicial aventado para forzar su dimisión.
«No está en juego la democracia por el hecho de que Sánchez se vaya o no, está en juego la democracia si permitimos que siga un Gobierno que es capaz de fagocitar todos los poderes del Estado«, indicó en alusión a la campaña del PSOE y sus terminales subvencionadas contra la prensa libre, la oposición y la independencia judicial.
Sánchez atribuye a los demás su propio comportamiento
Desde que Sánchez anunció su dejación de funciones con una carta que, bajo la habitual pátina de cursilería, constituyó una versión de la ‘alerta antifascista’ de Iglesias en Andalucía, el Gobierno y sus afines subvencionados ha iniciado la criminalización pública de periodistas, de la oposición y de la judicatura, llegando a difundir, según denunció el PP, los datos particulares de la hija del juez encargado de la querella contra Begoña Gómez.
En la carta, Sánchez realizó, además, un ejercicio de proyección de manual, atribuyendo a quienes le plantan cara la comisión del repertorio completo de argucias que presisamente llevan años practicando el PSOE, el Ejecutivo y sus cómplices parlamentarios y mediáticos.
Con ayuso como ejemplo de señalamiento permanente, los arriba citados han practicado contra el discrepante, desde campañas virales de insultos -en tribuna parlamentaria y por parte de activistas que ejercen de periodistas-, hasta la criminalización personal, incluyendo revelación de datos de familiares con el fin de amedrentar a través de ellos a quien, en solitario, tenga capacidad de resistir el intento de asesinato civil.
Según la doble vara de medir imperante, investigar presuntos delitos perpetrados por familiares de un socialista es una ‘línea roja’, pero poner en la picota a familia de un enemigo político -como pasó con el hermano de Ayuso– resulta aceptable, aunque jamás esa persona haya tenido proyección pública, ni problemas legales.
