Si España fuese un país serio, este inmigrante ya estaría deportado y jamás podría volver porque las fronteras estarían protegidas y militarizadas. Pero no lo somos
La Guardia Civil ha detenido a un inmigrante marroquí de 25 años, como presunto autor de siete robos en interior de vehículo, ocurridos en la localidad de Oliva, municipio de Valencia.
Para ejecutar los robos, el marroquí fracturaba los cristales de las ventanillas de los vehículos con piedras de gran tamaño y similares. Una vez accedía al interior de los coches, sustraía los objetos personales que hallaba, según informaciones del instituto armado.
A este inmigrante, también se le imputa un robo en vivienda habitada, en el mismo municipio. La autoridad judicial ha decretado el ingreso en prisión del detenido.
Si España fuese un país serio, este delincuente importado ya estaría deportado y jamás podría volver, porque las fronteras estarían protegidas. Pero no somos un país serio.
