El inmigrante tiene condena hasta 2031 por varios robos con fuerza y con intimidación. La violencia en las cárceles catalanas es diaria
Un violento recluso marroquí de 23 años, encarcelado en la cárcel Mas d’Enric, Tarragona, ha atacado violentamente a uno de los funcionarios del centro penitenciario. Los hechos ocurrieron ayer viernes por la tarde, en el Departamento Especial de Régimen Cerrado (DERT), el módulo donde se realiza el aislamiento de los internos que generan problemas o conflictos. En este caso, el inmigrante le ha pegado un puñetazo en la cara a dicho funcionario.
El agresor pudo ser reducido antes de que le pudiera hacer aún más daño y fue trasladado nuevamente a su celda, mientras el funcionario acudió a recibir atención médica para comprobar el alcance de las lesiones que le había provocado. El interno, que ya ha pasado en varias ocasiones por la cárcel, tiene una condena que se alarga hasta julio de 2031 por los delitos de robo con fuerza y robo con violencia e intimidación.
El de este viernes en la prisión de Mas d’Enric, la misma donde hace medio año un preso mató a la encargada de la cocina, es sólo el último capítulo de la violencia que los funcionarios de prisiones deben vivir día a día en Cataluña.








