El inmigrante intentó clavar un cuchillo a la víctima para atracarle. Aún así, un juez le ha dejado en libertad. ¿Por qué? Que asco de «justicia»
La Policía Nacional ha detenido en Burjassot, municipio de Valencia, a un inmigrante marroquí de 34 años, como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación. El delincuente importado, sacó de su pantalón un cuchillo de grandes dimensiones con intención de clavárselo a una persona que dormía en la calle, que pudo esquivar la embestida. Posteriormente, le golpeó con una piedra en el rostro, provocándole lesiones y un desmayo, y robó sus pertenencias.
Los hechos tuvieron lugar el pasado lunes sobre las cuatro de la mañana, cuando la víctima, que se encontraba durmiendo en la calle, se percató de que el marroquí ahora detenido, estaba hurgando en sus pertenencias, según ha indicado el cuerpo policial en un comunicado.
Al recriminarle este hecho la víctima, el inmigrante sacó de su pantalón un cuchillo de grandes dimensiones con intención de clavárselo, pudiendo el afectado esquivarlo. Luego, le golpeó con una piedra en el rostro a la víctima que sufrió lesiones y un desvanecimiento.
Lo más vergonzoso de todo, es que a pesar de la violencia cometida, un juez ya ha dejado en libertad a este criminal. Ni será deportado, ni encarcelado. ¿Por qué?








