Los concejales de Vox en Málaga, Antonio Alcázar y Yolanda Gómez, han rechazado el uso de coches oficiales con conductor, un privilegio al que sí han accedido otros grupos municipales. Ambos ediles defienden una gestión pública austera y consideran que estos recursos deberían destinarse a servicios esenciales como educación, parques infantiles y mejoras en los barrios.
Una decisión basada en la austeridad
Según explicó Antonio Alcázar, portavoz de Vox, a los pocos días de comenzar la legislatura, un funcionario se presentó en su grupo municipal para ofrecerles un coche oficial con conductor. «Nos sorprendió bastante y lo rechazamos. Si hemos venido a cambiar las cosas, no podemos hacer lo mismo que los demás. En mi trayectoria en empresas privadas nunca he tenido coche oficial ni conductor», declaró Alcázar en una entrevista con Diario Sur.
Yolanda Gómez, viceportavoz de Vox, también ha cuestionado la necesidad de estos vehículos para los concejales: «Si vamos a un acto donde no se puede aparcar, tomamos un taxi y lo cargamos a la asignación del grupo. Lo que no entendemos es la cantidad de coches oficiales en el Ayuntamiento; nos parece un despilfarro público».
Coches oficiales y gasto público en Málaga
Según información proporcionada por el área de Servicios Operativos, el Ayuntamiento de Málaga dispone de 225 vehículos en su flota pública, con un coste anual de mantenimiento de 220.000 euros. Además, el Ayuntamiento cuenta con tres coches oficiales adicionales para las distintas áreas municipales.
Gómez estima que el gasto total de estos coches oficiales asciende a 217.000 euros anuales: 200.000 euros corresponderían al sueldo de los chóferes oficiales, 5000 euros de mantenimiento y 12.000 euros en concepto de amortización de los vehículos.
Petición de explicaciones a la concejala de Servicios Operativos
Inconforme con las respuestas recibidas, Yolanda Gómez ha solicitado la comparecencia de Teresa Porras, concejala de Servicios Operativos, en la comisión de Medio Ambiente este lunes para exigirle explicaciones.
Entre sus preguntas, destacan: ¿Cada concejal del equipo de gobierno del PP dispone de un vehículo de uso habitual?, ¿Cuáles son los salarios brutos de los conductores?, ¿Cuál es el valor contable de los coches oficiales?
Con esta iniciativa, Vox busca impulsar un uso más eficiente de los recursos públicos y cuestionar el privilegio político que, según ellos, representa el mantenimiento de coches oficiales para la oposición.








