El informe patrimonial del ex número 3 del PSOE elaborado por la Guardia Civil encuentra otra propiedad que no declaró al Supremo ni al Congreso
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha descubierto un nuevo inmueble a nombre del exministro de Sánchez y ex número 3 del PSOE, José Luis Ábalos. Se trata de una lujosa propiedad situada en Colombia, cuyo valor supera los 2,1 millones de euros, según un informe presentado por los investigadores al juez instructor del Supremo.
La mansión está ubicada en la dirección «lote parcelación mirador del Carmen, corregimiento de la Moralia, lote nº 2 parcelación mirador del Carmen de Tuluá (Colombia)». Según el registro de compraventa, la operación se cerró por 2,5 millones de dólares, lo que equivalía en ese momento a 2.137.848 euros.
Según recoge el diario ‘Levante’ para cumplir con la orden judicial del Supremo, los agentes realizaron un «análisis parcial de los dispositivos electrónicos incautados por la Unidad» en el marco del caso Koldo-PSOE. Se da la circunstancia de que en la vivienda de Koldo García, principal asesor de Ábalos, se encontraron dos archivos digitales bajo el nombre «TULUA.pdf».
En uno de ellos aparece un «formulario de calificación» fechado el 22 de octubre de 2003, que documenta la compra de una propiedad el 17 de octubre de ese mismo año. En la transacción, Ábalos figura como comprador y la sociedad Hoyos Peláez Limitada como vendedora.
Inmuebles en Perú y Colombia que Ábalos no mencionó en su declaración
Este inmueble en Colombia se suma a otra propiedad adquirida en Perú, que, según Ábalos, fue comprada con fines fundacionales. Ante el juez del Supremo, el pasado 20 de febrero, el exministro declaró ser propietario de su vivienda habitual en Valencia, así como del local ubicado en la planta baja del mismo edificio.
Sin embargo, en su declaración inicial omitió mencionar otro local comercial de 187 metros cuadrados en Valencia, adquirido en proindiviso en marzo de 2003 por 120.000 euros. Posteriormente, en 2013, amplió su participación en el inmueble con una nueva compra por 30.577 euros.
Días después, su defensa presentó ante el Tribunal Supremo las escrituras y la documentación sobre la subrogación del préstamo hipotecario de dicho local, formalizada en septiembre de 2015.








