La Policía Nacional ha abierto una investigación tras una brutal agresión con arma blanca registrada esta madrugada en la barriada malagueña de El Palo.
Un hombre de 59 años ha sido detenido como presunto autor del ataque a su compañera de piso, una mujer de 46 años que logró huir del domicilio y pedir ayuda tras sufrir varias heridas en el cuello, pecho, manos y un brazo.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 2:30 de la madrugada en la calle Asturias, donde varios vecinos alertaron a los servicios de emergencia al ver a la víctima malherida en la vía pública. Agentes de la Policía Local acudieron de inmediato y encontraron a la mujer tendida en el suelo, cubierta de sangre, en estado grave.
Gracias a la rápida intervención de los agentes y vecinos de el Palo, se consiguió taponar las heridas hasta la llegada del personal sanitario, que la trasladó de urgencia al Hospital Regional Universitario de Málaga. Fuentes médicas confirman que su estado es estable.
Los efectivos localizaron el domicilio del presunto agresor
Donde fue hallado con cortes en el cuello. También fue trasladado a un centro hospitalario y, según fuentes policiales, su estado es igualmente estable. El hombre ha quedado detenido, aunque las primeras pesquisas indican que ambas partes se acusan mutuamente de la agresión.
Según fuentes del caso citadas por Diario SUR, la mujer relató que fue atacada de forma sorpresiva durante una estancia puntual en el domicilio que compartían en la barriada de El Palo. El detenido, en cambio, aseguró que la mujer lo hirió con intención de robarle.
La investigación sigue abierta para esclarecer los hechos en su totalidad. Por el momento, se descarta que se trate de un caso de violencia de género, y no se descartan nuevas actuaciones conforme avancen las diligencias.
Este suceso vuelve a poner sobre la mesa la creciente inseguridad en determinadas zonas urbanas, y plantea dudas sobre la eficacia del Estado en el control de comportamientos violentos. La rápida actuación policial y la colaboración vecinal de El Palo han sido determinantes para evitar un desenlace aún más trágico.
