La Policía Nacional ha detenido a una joven de 18 años en Málaga capital por un presunto delito de atentado contra personal sanitario
Los hechos ocurrieron el pasado viernes 2 de mayo en el centro de salud de La Roca, cuando la arrestada, tras acudir al ambulatorio para someterse a unas pruebas médicas, arrojó un bote de orina al rostro de una enfermera y se abalanzó sobre ella con intención de agredirla.
Según la nota oficial difundida por la Policía, los hechos se produjeron sobre las 09:00 horas, cuando la joven, en estado de gestación, se disponía a realizar una prueba de control de embarazo. Molesta con el tiempo de espera, comenzó a insultar a la enfermera que la atendía. Ante la atónita mirada de los presentes en la sala, la situación derivó en una agresión directa, al arrojar el bote de orina, empapando a la sanitaria.
La joven no se detuvo ahí. Se abalanzó sobre la trabajadora, afortunadamente el personal de seguridad del centro, actuó con celeridad para controlar la situación y dio aviso inmediato al 091.
Una patrulla de la Policía Nacional se personó en el centro médico y procedió a la detención de la agresora, quien fue puesta a disposición judicial ese mismo día, en el marco de un juicio rápido tras la denuncia presentada por la víctima.
Este nuevo episodio de violencia contra los profesionales sanitarios evidencia el preocupante deterioro de la convivencia en espacios públicos esenciales como los centros de salud. En un contexto de creciente crispación y falta de respeto hacia la autoridad y los servidores públicos, resulta indispensable que las instituciones refuercen los mecanismos de protección y garanticen el principio de autoridad en el ejercicio de sus funciones.
