Mientras el separatismo se entretiene con sus obsesiones identitarias y la izquierda se esconde en su burbuja ideológica, Cataluña arde por dentro. El pasado 15 de mayo, justo antes del derbi catalán, un atropello múltiple sacudió el corazón de nuestra tierra. En lugar de respuestas, el pueblo catalán ha recibido silencio, opacidad y pasividad.
Pero VOX ha dicho basta.
VOX pone contra las cuerdas al Govern
Joan Garriga Doménech, portavoz del Grupo Parlamentario de VOX en Cataluña, ha exigido la comparecencia inmediata de la Consellera d’Interior i Seguretat Pública ante la Comissió d’Interior i Seguretat Pública del Parlament. ¿El motivo? Exigir explicaciones urgentes por la gestión nefasta del atropello ocurrido justo antes de un evento deportivo de máxima afluencia.
No es una petición cualquiera. Se trata de un acto de responsabilidad patriótica, amparado en el artículo 173 del Reglamento del Parlamento. VOX, como siempre, al frente de la defensa del ciudadano.
¿Dónde estaba la policía? ¿Dónde estaba Interior?
El atropello se produjo en un contexto altamente previsible: un derbi con decenas de miles de asistentes. ¿Qué hizo la Conselleria de Interior? ¿Qué dispositivo había? ¿Quién dio las órdenes? ¿O acaso nadie estaba al mando mientras el caos se apoderaba de las calles?
Las imágenes, los testimonios y la rabia de los afectados no dejan lugar a dudas: algo falló y alguien debe pagar por ello. No es aceptable que la vida de los catalanes se deje a merced del descontrol.
Un Govern obsesionado con la independencia y ciego a la realidad
Mientras los catalanes sufren, el Govern sigue recitando su catecismo separatista. ¿De qué sirve tener un Departament d’Interior si no protege a la ciudadanía? ¿Por qué se destina más tiempo y recursos a la «construcción nacional» que a garantizar la seguridad de las familias?
VOX lo ha dicho siempre alto y claro: la seguridad no es negociable. No se puede permitir que Cataluña se convierta en un territorio donde el crimen, la inseguridad y la impunidad campen a sus anchas.
VOX, la única oposición real y valiente
Frente al silencio de los partidos del consenso progre, frente al servilismo del PSC y la tibieza del PP catalán, solo VOX ha dado un paso al frente. Joan Garriga ha exigido la comparecencia inmediata de la consellera para que responda, con nombres, datos y hechos. Porque las víctimas merecen justicia, y VOX está aquí para garantizar que la obtengan.
¡Basta de esconder la verdad!
El atropello no fue un simple accidente. Fue el síntoma de un sistema podrido, donde el desgobierno, la improvisación y el desinterés por el orden público lo infectan todo. ¿Dónde están las dimisiones? ¿Dónde están los ceses? ¿Dónde está la vergüenza política?
VOX exige depuración de responsabilidades. Y lo exige ya.
Los culpables deben rendir cuentas
No puede quedar impune la negligencia que ha puesto en riesgo vidas. No puede seguir el Govern tapando sus errores bajo toneladas de propaganda. El Parlament debe volver a servir al pueblo, no a las obsesiones separatistas.
VOX defenderá, sin descanso, la seguridad de todos los catalanes. Aunque les duela. Aunque les moleste. Aunque se atraganten con la verdad.
Por una Cataluña segura, española y libre
Este atropello ha encendido las alarmas, pero también ha puesto en evidencia que solo VOX se atreve a decir lo que nadie más dice: Cataluña necesita orden, necesita ley y necesita firmeza.
Porque Cataluña es España. Y España no se rinde.








