Hazte Oír y Manos Limpias anuncian una querella contra José Ramón Navarro por revelación de secretos
No lo ha dudado VOX. Ha tomado la directa ante las últimas informaciones conocidas y que reflejan las peligrosas y dudosas prácticas democráticas del presidente Pedro Sánchez con la Audiencia Nacional.
De esta manera, VOX acaba de pedir en estos instantes la comparecencia del ministro de Justica, Bolaños, así como la de José Luis Ábalos por la filtración de secretos del expresidente de la Audiencia Nacional a Pedro Sánchez.
Paralelamente a la iniciativa de VOX, Hazte Oír y Manos Limpias anuncian la interposición de sendas denuncias contra el ex presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, por un delito de revelación de secretos.
La primera de las organizaciones avanza que, tras la información de El Mundo, va a solicitar que testifiquen el ex ministro José Luis Ábalos y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Un hecho gravísimo
«Se trata de un hecho gravísimo y la Justicia debe investigarlo«, ha precisado en un comunicado tras desvelar El Mundo que Navarro filtró con dos meses de antelación el fallo absolutorio del juicio contra el ex jefe de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero. Va en la línea de VOX.
A través de varios mensajes de Whatsapp quien fuera máximo responsable de la Audiencia Nacional informó en agosto de 2020 a Ábalos que la sentencia ya estaba elaborada, iba a ser absolutoria y se notificaría en unas semanas.
Dos meses antes de que se notificara el fallo, Pedro Sánchez ya sabía que la Audiencia Nacional iba a absolver al mayor de los Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, por su papel en el procés independentista de Cataluña.
El presidente del Gobierno lo sabía porque se lo filtró nada menos que el entonces presidente de la Audiencia, José Ramón Navarro, mediante un mensaje a José Luis Ábalos.
Y no solo eso, como revela El Mundo. Después les fue avisando de que la prensa ya se lo olía, para que estuvieran preparados. Y les hizo saber el día exacto de la notificación del fallo. Así lo atestiguan los whatsapps en poder de la UCO.








