La increíble historia de Juan, ginecólogo de 86 años en Madrid, que tras asistir 10.000 partos trajo al mundo a su propio bisnieto.
Un bisnieto con el mejor recibimiento del mundo
Pocos bebés pueden presumir de haber sido recibidos por las manos de su propio bisabuelo, y menos aún por un ginecólogo con más de seis décadas de experiencia.
El pequeño Leo llegó al mundo rodeado de ciencia, amor y una pizca de humor, porque Juan no pierde la sonrisa ni a los 86 años: “Si el Atleti no gana la Champions, yo seguiré trayendo niños al mundo”. Una mezcla de ternura y pasión que convierte este parto en una historia de esas que se cuentan de generación en generación.
Hay historias que trascienden lo profesional y se convierten en momentos únicos. Es el caso de Juan Vidal, un ginecólogo madrileño de 86 años que, tras haber asistido más de 10.000 partos desde 1964, acaba de vivir el nacimiento más especial de su vida: el de su propio bisnieto Leo.
“Era mi ilusión y ha salido perfecto, uno de los mejores partos que he asistido en mi vida”, confesó emocionado a Madrid Directo de Telemadrid.
Una carrera marcada por más de 10.000 partos
Juan comenzó su trayectoria como ginecólogo en 1964 y, 61 años después, sigue en activo. Asegura sentir “una especie de adicción a traer niños al mundo”, lo que le ha permitido prolongar su carrera mucho más allá de la edad de jubilación habitual.
Aunque reconoce que mucha gente le pregunta cuándo piensa retirarse, su respuesta siempre es la misma:
“Me jubilaré cuando el Atleti gane la Champions”.
Un parto con triple vínculo: madre, abuelo y bisabuelo
La protagonista de esta historia es Meriam, nieta de Juan, que viajó desde Londres para que su abuelo asistiera a su parto en Madrid. “Estamos muy agradecidos porque hemos estado en las mejores manos”, aseguró.
Ella misma relató la tranquilidad con la que vivió el nacimiento: “Salió todo muy bien”.
Para Juan, traer al mundo a su bisnieto es incluso “más especial que los partos de mis hijos y nietos”.
Entre el quirófano y el fútbol: un destino rojiblanco
La otra gran pasión de este veterano médico es el Atlético de Madrid. Con lágrimas en los ojos recuerda las tres finales de Champions perdidas: 1974, 2014 y 2016. Por eso, ha hecho de su jubilación una promesa ligada al destino de su equipo: solo colgará la bata cuando el Atleti levante la ansiada Copa de Europa.
Un legado imborrable
Con más de seis décadas dedicadas a traer vidas al mundo y una historia personal que emociona a generaciones, Juan Vidal se ha convertido en símbolo de pasión, entrega y amor por su profesión.
Su bisnieto Leo ya tiene una anécdota inolvidable que marcará para siempre a toda la familia.








