La popularidad del canciller cae a mínimos históricos y Alternativa para Alemania (AfD) toma la delantera
El panorama político en Alemania atraviesa un momento crítico: el canciller Friedrich Merz registra sus peores niveles de aprobación desde que asumió el liderazgo, mientras que AfD (Alternativa para Alemania) se posiciona como el partido con mayor intención de voto a nivel nacional.
Según el último barómetro Deutschlandtrend, solo el 27% de los ciudadanos alemanes aprueba la gestión de Merz, frente a un abrumador 69% que se muestra insatisfecho. Esta caída sostenida refleja una profunda pérdida de confianza en el líder de la Unión Demócrata Cristiana (CDU).
El incumplimiento fiscal pasa factura a Merz
Uno de los principales factores detrás del colapso en la imagen del canciller es el incumplimiento de su promesa de mantener el freno de la deuda. Esta medida, altamente valorada por el electorado conservador, fue un pilar clave de su campaña. Sin embargo, el giro en la política fiscal ha erosionado su credibilidad y alimentado el desencanto de sus votantes tradicionales.
En comparación con septiembre, Merz ha perdido 6 puntos porcentuales en apoyo ciudadano, consolidando una tendencia descendente que lleva varios meses sin freno.
Rechazo generalizado al gobierno de coalición
La crisis de popularidad no se limita únicamente al canciller. El estudio muestra que el 77% de los alemanes rechaza la gran coalición CDU-SPD, señal clara del descontento creciente con el establishment político y los partidos tradicionales.
AfD supera por primera vez a CDU/CSU en intención de voto
El dato más impactante del sondeo es el cambio en la intención de voto a nivel nacional. Mientras la CDU/CSU cae al 24%, AfD asciende hasta el 27%, marcando una brecha histórica entre ambas formaciones. Esta es la primera vez que AfD lidera como principal fuerza política de Alemania según las encuestas.
Este sorpasso no solo representa un hito político, sino que también refleja un cambio profundo en las preferencias del electorado, especialmente en medio de crecientes preocupaciones por la inmigración, la inseguridad y la crisis económica que afecta al país.












