La UCO detecta “ingresos irregulares” en el marco de un presunto cobro de comisiones a cambio de obra pública en dentro del caso Koldo/PSOE
El ex ministro de Transportes, el socialista José Luis Ábalos comparece en el Tribunal Supremo ante el instructor del caso Koldo, Leopoldo Puente. Lo hace después de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detectara “ingresos irregulares” en el marco del presunto cobro de comisiones a cambio de obra pública.
Estos días se anda especulando mucho por el futuro del que fuera secretario de Organización del PSOE y auténtica mano derecha de Pedro Sánchez. Y ese futuro puede ser la cárcel para acompañar a otro personaje socialista: Santos Cerdán.
Como relata OkDiario, Ábalos, antes de dirigirse al Supremo, había pasado por su despacho en el Congreso para hablar con su secretaria. De ahí se subió a un taxi en la Carrera de San Jerónimo rumbo al Palacio de Las Salesas.
Ábalos ha llegado a la calle de Marqués de la Ensenada sin la compañía de su abogado, José Aníbal Álvarez. Ayer se supo que renunció a que le representase en esta causa por “diferencias irreconducibles”. Según informó al Supremo por escrito, “lejos de constituir una circunstancia puntual en el tiempo, se han convertido en una constante”, hasta el punto de que habría tenido que “preparar” su declaración por sí mismo.
En vísperas de su nueva cita en el Supremo, el ex ministro pidió a Puente que le designara abogado de oficio. El instructor no solo lo rechazó de forma tajante, sino que apreció en ello un intento de eludir su comparecencia. Habló directamente de “fraude de ley”.
Solicitud de ingreso en prisión
Las acusaciones populares estudian pedir este miércoles el ingreso en prisión provisional del que fuera secretario de Organización del PSOE.
Ya lo hicieron en la última vistilla. Entonces la Fiscalía Anticorrupción se opuso y el instructor lo rechazó.
Así pues, la cita de este miércoles en el Supremo llega precedida de un gran nerviosismo, como cita OkDiario, que podría provocar un cambio de estrategia por parte de Ábalos.
En las otras tres ocasiones, ha optado por declarar, negando cualquier conducta delictiva. Esta vez, de acuerdo con las fuentes consultadas por OkDiario, su abogado pretendía seguir en la misma línea, lo que podría haber precipitado la ruptura ante el deseo del “soy feminista porque soy socialista” (o viceversa) de guardar silencio.
