El Partido Popular vuelve a asestar un golpe letal a la libertad y a la economía de los madrileños
A partir del 1 de enero de 2026, cerca de 400.000 vehículos sin etiqueta medioambiental tendrán prohibida la circulación en toda la ciudad de Madrid, bajo la implementación definitiva del plan Madrid 360. Esta medida afectará a todos los coches sin distintivo, sin importar si están empadronados, pertenecen a personas con discapacidad o son usados por negocios y hosteleros.
La decisión fue ratificada este martes en el pleno del Ayuntamiento de Madrid, donde la propuesta de VOX de eliminar la última fase de Madrid 360 fue rechazada por todos los grupos políticos. El Partido Popular justificó su postura señalando que se trata de un requisito impuesto por la Unión Europea, mientras que PSOE y Más Madrid defendieron la medida argumentando que busca cumplir con criterios de sostenibilidad y afrontar la emergencia climática.
Restricciones ampliadas: más barrios afectados
Hasta ahora, las limitaciones solo se aplicaban dentro de la M-30, pero a partir de enero de 2026 la prohibición se extenderá a barrios de renta media y baja, como Vallecas, Usera y Villaverde. En estas zonas, donde el coche es fundamental para trabajar o desplazarse, la norma supondrá un impacto directo en la economía familiar.
La medida no contempla excepciones:
- Personas con discapacidad: quienes utilicen coches adaptados sin etiqueta deberán sustituirlos para evitar sanciones.
- Negocios y hosteleros: las empresas de reparto que no cuenten con vehículos con distintivo no podrán entregar mercancías.
- Talleres mecánicos: no podrán atender coches sin etiqueta, aunque sean clientes habituales.
Controversia y críticas
La Asociación Vehículos Afectados por Restricciones Medioambientales (AVARM) ha denunciado desde hace años que estas restricciones vulneran el artículo 14 de la Constitución, que garantiza la igualdad ante la ley. Según AVARM, las medidas penalizan especialmente a las familias con menos recursos, que no pueden permitirse un vehículo nuevo o eléctrico.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ya anuló parcialmente Madrid Central y la Zona de Bajas Emisiones de Plaza Elíptica por considerarlas contrarias a derechos fundamentales. Sin embargo, el Ayuntamiento recurrió ante el Tribunal Supremo, y la asociación aún espera un fallo definitivo.
Mariano Vallejo, portavoz de AVARM, explicó a Vozpópuli: “Muchos madrileños pagan impuestos por coches que no usan, y si los usan, pueden ser multados. Es una situación insostenible para las familias”.
Protestas y soluciones alternativas
Para manifestar su rechazo, AVARM ha convocado una manifestación el 22 de noviembre frente al Palacio de Cibeles, donde esperan reunir a miles de ciudadanos. La asociación advierte que la normativa no solo afectará a los coches sin etiqueta, sino que podría extenderse a los vehículos con etiqueta B y C en el futuro.
Algunos residentes ya han tomado medidas como trasladar sus coches a segundas residencias o venderlos a vecinos de municipios limítrofes donde aún pueden circular. Una situación que refleja la presión que genera la transición ecológica sobre miles de trabajadores y familias en Madrid.








