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Barrabés se blinda en el Senado y se niega a declarar en pleno avance del caso Koldo

Juan Carlos Barrabés se niega a declarar en la comisión del caso Koldo en el Senado mientras la investigación que afecta a Begoña Gómez y al entorno del Gobierno sigue avanzando.

El empresario Juan Carlos Barrabés, una de las piezas clave en la investigación que afecta a Begoña Gómez, la esposa de Pedro Sánchez, acudió este jueves al Senado para comparecer en la comisión del caso Koldo. Pero lo hizo con un mensaje claro y calculado: no responderá a ninguna pregunta.

La palabra clave del día aparece desde el primer párrafo: Barrabés se acoge a su derecho a no declarar. Y eso ha encendido todas las alarmas en una causa que crece cada semana.

Barrabés llega escoltado por su esposa y su abogada y anuncia silencio total

Antes de que los senadores pudieran lanzar la primera pregunta, Barrabés dejó claro que no iba a contestar. Argumentó que todo lo que se le pregunta ya está siendo investigado por la vía judicial y que responder ahora podría perjudicar su defensa.

También aprovechó para recalcar tres ideas muy medidas:

  • Nunca ha tenido relación profesional con Koldo García.

  • Nunca ha intervenido en contratos, licencias o ayudas vinculadas a la trama investigada.

  • Él y sus empresas han actuado “con absoluta regularidad”.

Un discurso diseñado para marcar distancia con la operación Delorne, pero sin explicar nada más.

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Los grupos intentan interrogarlo pero chocan con un muro de silencio

La primera en intentarlo fue la senadora de UPN, María del Mar Caballero. Preguntó, insistió, repreguntó… y Barrabés se limitó a repetir que seguiría el consejo de sus abogados.

Luego tomó la palabra la senadora de Vox, Paloma Gómez, cuyo tono obligó al presidente de la Comisión, Eloy Suárez (PP), a recordarle que debía dirigirse al compareciente “con respeto”.

El empresario mantuvo la misma respuesta para todos: lo preguntado “ya está explicado en el juzgado” o incluso “publicado”.

Un silencio que pesa más que cualquier respuesta

La comparecencia de Barrabés era uno de los momentos más esperados de esta fase del caso. Su vinculación con la trama que investiga el juez Juan Carlos Peinado —la misma que afecta a Begoña Gómez— ha generado una enorme expectativa política.

Pero su negativa a contestar vuelve a situar la presión en el Gobierno y en La Moncloa. No es la primera vez que una pieza relevante de la causa opta por blindarse: hace semanas explicábamos cómo Begoña Gómez será juzgada por un jurado popular según revelaba otra investigación judicial (enlace interno natural: Begoña Gómez será juzgada por un jurado popular por todo el caso y no solo por la malversación).

Y la sombra del caso Koldo sigue creciendo: lo vimos también en La UCO revela que Ábalos y Koldo García recibieron sobresueldos en efectivo del PSOE (enlace interno) , pieza clave de la misma trama.

Todo lo que sabemos hasta hoy del caso Ábalos–Koldo – Análisis detallado

¿Por qué importa tanto lo que diga (o no diga) Barrabés?

Porque Barrabés es el empresario cuyo nombre aparece en varios episodios decisivos del caso que afecta a la esposa de Sánchez. Y porque su silencio puede interpretarse como:

  • Una estrategia de defensa.

  • Una forma de evitar contradicciones.

  • O una señal de que la investigación judicial va más avanzada de lo que se sabe públicamente.

En cualquier caso, su comparecencia no ha aportado luz. Al contrario, ha alimentado la tensión política.

El Senado intensifica el foco sobre la red del caso Koldo

La negativa de Barrabés a declarar coincide con un clima político en el que cada avance judicial tiene impacto directo en el Gobierno. La causa que dirige el juez Peinado ha sido reforzada por decisiones recientes, como la confirmación de la Audiencia de Madrid que avaló la instrucción del caso Begoña, como explicábamos en La Audiencia de Madrid avala la instrucción judicial del caso Begoña (enlace interno) .

Y la presión sobre el Ejecutivo aumenta a medida que más comparecientes guardan silencio.

Las próximas semanas serán decisivas: nuevas citaciones, informes en camino y más sesiones de comisión. Pero hoy el mensaje que queda es uno: Barrabés no habla.

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