Los fondos se integran en una única partida nacional y las Comunidades no podrán decidir sobre el reparto de ayudas
Nuevo desastre internacional para España, representada por un Gobierno irrelevante. Este viernes se ha conocido que la Comisión Europea reducirá en un 20% los fondos agrícolas y estructurales destinados a España en el próximo presupuesto plurianual de la Unión Europea, correspondiente al periodo 2028-2034.
Según el primer borrador de reparto por países presentado por Bruselas, que recoge El Español, la rebaja supone una disminución de 20.000 millones de euros respecto a los aproximadamente 100.000 millones asignados a España en el período 2021-2027.
En total, la cifra que correspondería a España en el nuevo presupuesto se situaría en 79.900 millones de euros, sumando todos los fondos agrícolas y regionales. El Gobierno socialcomunista español, encabezado por el yerno se Sabiniano, culpa de los tijeretazos al aumento del gasto en Defensa de la UE.
Se pierden por completo los fondos Next Generation
Además de esta reducción, España perdería completamente los 163.000 millones de euros vinculados a los fondos Next Generation, que se dividieron entre 80.000 millones en subvenciones no reembolsables y 83.000 millones en préstamos en condiciones ventajosas.
Ursula von der Leyen descartó de forma expresa renovar este instrumento por presiones de países como Alemania y los Países Bajos. Esto implica que, con independencia del resultado de las negociaciones, España e Italia serán los grandes perjudicados en el nuevo ciclo presupuestario de la Unión.
Los fondos se integran en una partida nacional y las Comunidades no podrán decidir sobre el reparto
La propuesta de Bruselas incluye una modificación de fondo en la gestión de las ayudas: la administración de los fondos estructurales, agrícolas y migratorios pase a estar completamente en manos de los Estados miembros, integrándose todos en una única partida nacional.
Este planteamiento supondría una pérdida significativa de autonomía para las Comunidades, pues ya no podrán decidir cómo se distribuyen las ayudas.
En el plan comunitario, los 79.900 millones destinados a España no aparecen detallados por partidas, aunque se establece que al menos 16.300 millones deben ir dirigidos a las regiones cuyo PIB sea inferior al 75% de la media de la Unión Europea. En la actualidad, estas zonas comprenden Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura, Ceuta y Melilla.








