La exjefa de la banda de ultraizquierda separatista se beneficia de la reforma de Sánchez y descontará años de cárcel por otra condena en Francia
La Audiencia Nacional condena a 26 años y 9 meses de cárcel a la exdirigente de la banda de ultraizquierda ETA, Ainhoa García Montero ‘Laia’ por el asesinato del empresario José María Korta, el 8 de agosto de 2000.
La terrorista independentista vasca asesinó a su víctima mediante la explosión de un coche-bomba cuando salía de su empresa ubicada el polígono industrial Gorostiaga de Zumaya (Guipúzcoa).
Por este atentado, la Audiencia Nacional ya condenó en 2003 a dos compinches de García, los pistoleros nacionalistas Ibon Etxezarreta y Patxi Xabier Makazaga, a 25 y 27 años de cárcel respectivamente.
´Laia´ descontará años de cárcel gracias a la reforma legal de Sánchez
Se trató de una sentencia dictada de conformidad entre las partes que aceptó la propia asesina. Según informaron fuentes jurídicas al ‘Diario de Navarra’, al aceptar García esta condena evita llegar al límite de los 30 años de cárcel, lo que le permitirá descontarse la condena previa en Francia, tal y como establece la reciente reforma legal de Sánchez.
García fue arrestada en mayo de 2003 en Saintes, Francia, y fue condenada en España y en el país vecino. Entre las condenas que acumula la cabecilla terrorista figuran 22 años de prisión por acceder a armas y explosivos usadas para perpetrar atentados, como el asesinato del ex gobernador civil de Guipúzcoa, Juan María Jáuregui, y del ertzaina Mikel Uribe.
Asesinato con un coche-bomba, reconocido por la propia ‘Laia’
Según el relato de hechos probados, reconocidos por la propia terrorista nacionalista, ella formaba parte del ‘comando’ buruntza/zartako de la banda terrorista de extrema izquierda. En unión de otros terroristas, la asesina decidió matar a José María Korta Uranga, propietario de la empresa Korta y presidente de la Asociación de empresarios de Guipúzcoa.
La información sobre el empresario para poder perpetrar el crimen, indica la resolución, se la había facilitado la propia banda terrorista vasca.
Sobre las 12.15 horas del 8 de agosto de 2000, cuando José María Korta salió de su empresa y subió a su turismo, la asesina ‘Laia’ y otro pistolero ya condenado por el crimen, empleando un radio mando, hicieron detonar el explosivo que habían colocado en un coche colocado en paralelo al de la víctima, lo que le causó la muerte.
Para el Tribunal, la prueba practicada en la vista pone de manifiesto la participación de Ainhoa García en el atentado terrorista, teniendo cuenta el informe policial de Inteligencia, “de todo punto minucioso y concienzudo en el examen de los elementos tenidos en cuenta, interrelacionándolos” y dada la admisión de la terrorista de su implicación en los hechos.
