Saltar el contenido

Condenada a multa de 2000 euros por denuncia falsa en Tenerife

‘Con temerario desprecio hacia la verdad’, la mujer se inventó que su expareja la amenazó con pagar ‘a los rusos para que se encarguen’ de ella

La Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha sentenciado a una mujer por cometer un delito de denuncia falsa, imponiéndole una multa de 2.000 euros, de los cuales la mitad corresponde a indemnización por daños morales a la víctima.

Los hechos por los que se le condena se remontan a 2014, cuando presentó una acusación en la Comisaría de Puerto de La Cruz, inventándose que su pareja la había amenazado de gravedad.

En su declaración falsa, la condenada aseguró que la víctima se presentó en su domicilio dos días antes, la insultó y le dijo que iba a pagar 5.000 euros “a los rusos para que se encarguen de ti”, además de sujetarla por los brazos y zarandearla.

Se inventó que el hombre la amenazó con pagar ‘a los rusos para que se encarguen’ de ella

Sin embargo, las investigaciones determinaron que el hombre víctima de la acusación falsa ni siquiera se encontraba en el sur de la isla en las fechas señaladas, y se concluyó que la denuncia había sido interpuesta “con temerario desprecio hacia la verdad”. Esta criminalización le ocasionó daños morales al hombre en su entorno vecinal.

El caso iniciado contra la denunciante enfrentó retrasos no imputables a ella, pero concluyó con una condena por parte de un Juzgado de lo Penal, posteriormente confirmada por la Audiencia.

En su recurso contra el fallo inicial, la mujer argumentó que la condena se basaba en el testimonio de su expareja y de dos vecinos, quienes aseguraron que estaban cenando con él, además de la declaración de un camarero del restaurante en el sur de Tenerife que corroboró esta versión.

Denuncia falsa influida por la enemistad hacia su ex

La sentencia final señala que la denuncia estaba influida por la enemistad de la mujer hacia el acusado. Ella sostuvo que los testigos eran amigos de su expareja y que lo defendieron, pero la Sala interpretó esto como “una interpretación propia y personal” de las pruebas presentadas.

Según recoge el digital tinerfeño ‘Diario de Avisos’, también se valoraron otros elementos de prueba, como la factura del restaurante, para sustentar la resolución.

Deja tu respuesta