Los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística (INE) y del Ministerio del Interior muestran una diferencia constante en las tasas de condenas entre ciudadanos españoles y extranjeros en España.
Según las cifras más recientes, la tasa de condenas por cada 1.000 habitantes extranjeros es entre dos y dos veces y media superior a la de los nacionales.
El objetivo de este artículo es presentar los datos de forma objetiva, explicar cómo se calculan y qué factores pueden influir en esas diferencias.
1. Cuántos extranjeros viven en España
A cierre de 2023, España registraba 48,6 millones de habitantes, de los cuales 6,4 millones eran personas con nacionalidad extranjera, según el INE.
Eso equivale aproximadamente al 13,2 % de la población total.
La cifra incluye tanto ciudadanos de la Unión Europea (principalmente rumanos, italianos y búlgaros) como extracomunitarios (marroquíes, colombianos, venezolanos, chinos, entre otros).
2. Porcentaje de condenas por nacionalidad
El INE recopila cada año las estadísticas de condenados por sentencia firme.
En 2023, los registros judiciales reflejan que:
- 74,2 % de los condenados tenían nacionalidad española.
- 25,8 % de los condenados eran extranjeros.
Teniendo en cuenta que los extranjeros representan el 13 % de la población, la proporción de condenas es casi el doble de lo que correspondería por su peso demográfico.
3. Tasa de condenas por cada 1.000 habitantes
Para comparar adecuadamente ambos grupos, el INE publica tasas de condena ajustadas a la población:
| Nacionalidad | Tasa de condenas por cada 1.000 habitantes (2023) |
|---|---|
| Españoles | 5,8 |
| Extranjeros | 14,6 |
Esto significa que, estadísticamente, la probabilidad de que un extranjero sea condenado por un delito es 2,5 veces mayor que la de un ciudadano español.
4. Distribución por tipo de delito
Las diferencias no son iguales en todas las categorías delictivas:
- Delitos contra el patrimonio (hurtos, robos, estafas): entre el 35 % y el 40 % de los condenados son extranjeros.
- Tráfico de drogas: alrededor del 30 %.
- Delitos contra las personas (lesiones, violencia): en torno al 20 %.
- Delitos graves como homicidios o agresiones sexuales: la proporción de condenas a extranjeros baja a entre el 10 % y el 15 %.
Los datos muestran, por tanto, una mayor presencia relativa en delitos económicos o vinculados a entornos de vulnerabilidad, y una menor en los más graves o violentos.
5. Evolución histórica
La diferencia estadística se mantiene estable desde hace más de una década.
En 2010, la tasa de condenas a extranjeros era de 13,9 por 1.000 habitantes, frente a 6,3 en españoles.
En 2023, la diferencia se sitúa en 14,6 frente a 5,8.
El ratio de 2 a 2,5 se mantiene prácticamente constante en el tiempo, a pesar de variaciones en el número de residentes extranjeros.
6. Posibles factores explicativos
Los organismos que publican o analizan estas estadísticas (INE, Interior, Eurostat) coinciden en que las diferencias pueden estar influenciadas por varios factores:
- Edad media más joven de la población extranjera (entre 25 y 40 años, el tramo donde se concentran más delitos en general).
- Condiciones socioeconómicas: mayor tasa de paro, precariedad y falta de vivienda estable.
- Situación administrativa irregular, que puede implicar delitos relacionados con documentación o residencia.
- Mayor visibilidad policial en algunos colectivos y zonas urbanas.
Ningún informe oficial atribuye la diferencia a cuestiones de nacionalidad o cultura, sino a variables sociales y estructurales.
7. Comparación con Europa
El patrón español no es excepcional.
Según Eurostat (datos 2022–2023):
| País | % población extranjera | % condenas a extranjeros | Ratio |
|---|---|---|---|
| España | 13 % | 26 % | 2,0 |
| Italia | 10 % | 24 % | 2,4 |
| Alemania | 14 % | 32 % | 2,3 |
| Francia | 13 % | 27 % | 2,1 |
En todos los países europeos analizados, los extranjeros aparecen sobrerrepresentados en las estadísticas de condenas en una proporción similar (entre 2 y 2,5 veces).
8. Conclusión
Los datos oficiales muestran que en España las tasas de condena entre extranjeros son más altas que entre españoles, con una diferencia estadística de alrededor de 2,5 veces.
Esa diferencia se mantiene estable desde hace años y también se observa en otros países europeos.
Los expertos subrayan que la explicación no está en la nacionalidad, sino en factores como la edad, el nivel socioeconómico y la situación administrativa.
Más del 97 % de las personas extranjeras residentes en España no cometen delitos, según los registros judiciales y censales.
El análisis estadístico no debe confundirse con un juicio moral ni político:
la delincuencia se mide en cifras, no en identidades.
