La Policía Nacional ha detenido en Málaga capital al atracador de 36 años acusado de cometer tres robos con violencia en la avenida Ortega y Gasset. Sus objetivos: una sucursal bancaria, un supermercado y una farmacia, todos ellos atracados en apenas dos meses.
El atracador detenido utilizaba un cuchillo de grandes dimensiones, ocultaba su rostro con una mascarilla y actuaba siempre con una actitud violenta, según ha informado la Policía. Su perfil: rápido, selectivo y calculador. Escogía establecimientos próximos y se dirigía siempre a mujeres, probablemente al considerarlas menos resistentes físicamente ante la amenaza armada.
El último asalto ocurrió el 26 de mayo en una farmacia, de donde se llevó 800 euros tras intimidar a una empleada. Días antes, había robado 600 euros de un supermercado. El primer atraco, en abril, fue a una sucursal bancaria, donde amenazó a dos trabajadoras y sustrajo otro sobre con dinero en metálico.
La investigación del Grupo de Atracos de la Comisaría Provincial reveló patrones coincidentes en los tres casos: mismo arma, mismo tipo de víctima y mismo entorno. Finalmente, la policía desplegó un dispositivo de vigilancia que permitió su detención en la misma zona.
Durante el registro domiciliario, los agentes de Policía incautaron la ropa utilizada en los robos y el arma blanca. El detenido ha ingresado en prisión preventiva por orden judicial.
Este nuevo caso pone de relieve el deterioro de la seguridad en zonas urbanas, y evidencia la necesidad de reforzar la presencia policial, aplicar la ley con contundencia porque de nada sirve mirar hacia otro lado ante el repunte de violencia callejera que muchos aún prefieren minimizar.
