Cada vez que es arrestado un juez lo deja en libertad. ¿Por qué?
Un inmigrante de origen magrebí ha sido detenido por la Ertzaintza en siete ocasiones en tan solo diez días en la ciudad de Vitoria. Los arrestos comenzaron a principios de la semana pasada y se prolongaron hasta el miércoles, revelando un patrón delictivo que preocupa a las fuerzas de seguridad.
El individuo ha sido vinculado a hurtos de teléfonos móviles, robos de bicicletas y pequeños saqueos en supermercados. Sin embargo, lo que más alarma a los agentes es su comportamiento: cada vez que es sorprendido, responde con una actitud extremadamente agresiva.
Comportamiento violento en comisaría
Los agentes de la Ertzaintza que han tenido que intervenir en sus detenciones coinciden en señalar la dificultad que supone su arresto. Una fuente policial asegura que «cuando se le traslada al calabozo, siempre hay incidentes«.
En una intervención reciente en la comisaría de Portal de Foronda, fue necesario el uso de escudos para reducirlo dentro de la celda. Escupía, orinaba y mostraba una conducta completamente descontrolada, según relatan los agentes.
Continúa en libertad pese a sus antecedentes
A pesar de la gravedad de su comportamiento, el individuo sigue en libertad con cargos, ya que los delitos atribuidos son considerados de carácter leve. No obstante, su presencia en el Palacio de Justicia de Vitoria se ha vuelto habitual.
Un hecho que causó indignación entre los funcionarios ocurrió el mismo día en que fue liberado: el hombre orinó en una de las paredes del edificio judicial, lo que derivó en un expediente administrativo. Sin embargo, se sospecha que no abonará la multa por declararse insolvente.
Preocupación creciente entre los cuerpos de seguridad
La situación ha generado malestar entre los cuerpos policiales, que alertan sobre su creciente peligrosidad. Según fuentes de la Ertzaintza, el detenido incluso ha rechazado atención médica tras algunos altercados, y aseguran que «si no se adoptan medidas urgentes, la situación podría empeorar».
El historial delictivo del hombre no es reciente. En agosto ya fue detenido cinco veces por hechos similares. En algunas de las últimas intervenciones, ni siquiera fue puesto a disposición judicial, según decisiones de la Policía Local y de la propia Ertzaintza.
A la espera de juicio, pero sigue en libertad
Actualmente, el individuo espera la celebración de un juicio rápido. Mientras tanto, continúa en libertad, sumando antecedentes penales cada vez más numerosos, lo que ha provocado inquietud entre los agentes encargados de su seguimiento.








