La «maravillosa» solución policial y judicial ha sido llevarlos a un centro de menores en Madrid. Porque lo de deportarlos, nada. Que chiste de país somos
La Policía Nacional ha detenido a cuatro menores marroquíes en Elche, Alicante, en una operación contra el terrorismo yihadista. Según informaciones policiales, los inmigrantes se encontraban vigilados debido al riesgo de que pudieran perpetrar un ataque durante las festividades navideñas. Concretamente, en la Basílica de Santa María.
Los menores marroquíes, han sido trasladados al centro de menores Teresa de Calcuta de la Comunidad de Madrid. Esa ha sido la «brillante» decisión de las autoridades judiciales, porque lo de deportarlos, nada.
Al ser menores los arrestados, las penas se ajustan a la Ley del Menor. Las penas máximas contemplan hasta cinco años de internamiento en régimen cerrado, ampliables a ocho en casos graves para jóvenes de 17 años, y tres años de libertad vigilada.
Según publica La Gaceta de la Iberosfera, la presencia de menores en actividades relacionadas con el yihadismo ha aumentado notablemente. Un alto mando de los servicios de Información ha asegurado que «en todas las investigaciones actuales aparecen menores, algo que no era habitual antes».








