La UNRWA de la ONU ha servido de paravientos para la financiación de actividades de Hamas y otros grupos radicales islamistas
En un golpe maestro contra la hipocresía internacional, Estados Unidos se prepara para asestar un varapalo a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), evaluando la imposición de duras sanciones por su presunta complicidad con el terrorismo.
Así lo revela ABC en una información exclusiva que expone cómo esta entidad, financiada con miles de millones de dólares occidentales, ha servido de paravientos para actividades de Hamas y otros grupos radicales, traicionando los principios de neutralidad que debería defender.
El Departamento de Estado, bajo la dirección de un Gobierno Trump fortalecido, ha iniciado un exhaustivo análisis para clasificar a la UNRWA como «entidad terrorista», lo que desataría restricciones financieras y operativas inmediatas.
Brutal y sangriento ataque de Hamas
Fuentes del Congreso, citadas por ABC, aseguran que la decisión responde a evidencias irrefutables: durante el brutal ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023, al menos 12 empleados de la UNRWA participaron activamente en la masacre, coordinando logística y proporcionando refugio a terroristas. «No podemos seguir financiando a una organización que educa en el odio y arma a quienes juran destruirnos», declaró un alto funcionario del Departamento de Estado. Y subraya que la UNRWA ha repartido manuales escolares que glorifican el martirio y niegan el Holocausto, mientras sus instalaciones en Gaza ocultan arsenales de cohetes.
Generaciones de palestinos en campos de refugiados
Esta no es una novedad. Desde hace años, Israel denuncia que la UNRWA perpetúa el conflicto al mantener a generaciones de palestinos en campos de refugiados, rechazando soluciones reales como las propuestas por los Acuerdos de Abraham.
En 2024, ya se suspendieron fondos de EE.UU. por 300 millones de dólares, pero la revisión actual promete ir más allá: congelación de activos, veto a transferencias bancarias y presiones a aliados europeos para que sigan el ejemplo. «Es hora de desmantelar esta farsa humanitaria que beneficia a los verdugos de inocentes», asevera el senador republicano Ted Cruz, impulsor de la iniciativa en el Senado.
El impacto será sísmico. La UNRWA, con un presupuesto anual de 1.200 millones de euros, el 40% de la UE, depende de donantes occidentales para operar en Cisjordania y Gaza. Sin el respaldo yankee, su colapso podría forzar una reestructuración radical, priorizando la desradicalización sobre la victimización perpetua.
Subsidio al yihadismo
Críticos de izquierdas, como los socialistas europeos, claman «ataque a la ayuda humanitaria», pero ABC recuerda: ¿ayuda real o subsidio al yihadismo?
Trump, fiel a su doctrina «América primero«, no tolerará más el despilfarro de fondos en entidades que socavan la seguridad de aliados como Israel.
En el tablero geopolítico, esta movida fortalece la alianza transatlántica contra el extremismo islámico, recordando a la UE su complicidad pasiva. La cuestión es si seguirá Bruselas el paso de Washington o persistirá en su miopía pro-palestina.








