El Sanchismo impulsa el túnel de 40 kilómetros que unirá por ferrocarril África con Europa de cara a 2030
El presidente Sánchez quiere que, para 2030, el túnel de 40 kilómetros que unirá España y Marruecos bajo el Estrecho esté listo.
La idea es que el túnel submarino entre España y Marruecos, por el que circulará un tren que conectará la ciudad marroquí más poblada, Casablanca, con la capital española, Madrid, esté preparado antes del mundial de fútbol, tal como informa El Faro de Ceuta.
El túnel arrancará en Faro del Cabo Malabata, en Tánger y concluirá en Punta Paloma Playa, Tarifa.
A comienzos del pasado mes de marzo, el ministro de Transportes español, Óscar Puente, visitaba Marruecos y trasladaba el interés de España en el proyecto de enlace fijo por el Estrecho de Gibraltar, una cuestión de «carácter estratégico«.
Puente señaló el enorme interés que las empresas españolas tienen por participar en los proyectos de desarrollo del sector del transporte de Marruecos. España y el país africano han acordado elaborar un Plan de Comunicación común.
Ya el pasado 2023, con motivo de la Cumbre España-Marruecos que se celebró en Rabat, la entonces ministra de Transportes, Raquel Sánchez, aseguraba que se iba a dar «un impulso a los estudios del Proyecto de Enlace Fijo del Estrecho de Gibraltar que se inició por ambos países hace ya cuarenta años«.
El propio Pedro Sánchez abordó y oficializó la cuestión del túnel en la reunión que mantuvo con su homólogo marroquí, Nizar Baraka.
Para pasajeros y mercancías
El túnel prevé el transporte de pasajeros y mercancías entre dos terminales con trenes lanzadera para vehículos y camiones, a lo que habría que sumar trenes convencionales de viajeros y mercancías. La distancia entre las estaciones terminales será de 42 km; la del túnel de 38,7 km, de los cuales 27,8 kilómetros submarinos.
En el caso de la empresa pública española Secegsa, encargada por el lado hispano del proyecto, su objetivo, precisamente, “tiene sus orígenes en la Declaración Común Hispano-Marroquí, fechada en Fez el 16 de junio de 1979, mediante la cual, los reyes Hassan II de Marruecos y Juan Carlos I de España, conscientes de la importancia que en el futuro tendrían las relaciones entre los dos países y entre Europa y África, pusieron de manifiesto su deseo de trabajar conjuntamente en el desarrollo de dicho Proyecto”.








