«Hay una sola persona a la que debemos agradecer la paz y no es Greta. Se llama Donald Trump» ha afirmado la primera ministra italiana
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha generado ‘polémica’ tras sus recientes declaraciones sobre el conflicto en Gaza y el papel de los líderes internacionales. Durante una intervención pública, Meloni no dudó en ensalzar a Donald Trump, a quien calificó como el verdadero artífice de la paz, en contraste con figuras progresistas y activistas que, según ella, “alimentan los conflictos en lugar de resolverlos”.
Meloni critica a Greta Thunberg y defiende el papel de Trump en política internacional
En su discurso, Meloni lanzó una crítica directa a varios referentes de la izquierda y el activismo global, entre ellos Greta Thunberg, el líder sindical italiano Maurizio Landini y la relatora de la ONU para Palestina, Francesca Albanese. “Hay una sola persona a la que debemos agradecer la paz, y no es Greta. Se llama Donald Trump, presidente republicano de los Estados Unidos, parte de una tradición que apuesta por la diplomacia en lugar del conflicto”, afirmó la líder italiana.
Estas declaraciones se produjeron poco después de que una flotilla organizada por activistas intentara llevar ayuda humanitaria a Gaza, en medio del reciente alto al fuego en la región. Meloni calificó la acción como un acto de propaganda y aseguró que el envío no cumplió con los objetivos prometidos.
Acusaciones de instrumentalizar el sufrimiento y rechazo a las “causas vacías”
La jefa del Ejecutivo no escatimó críticas hacia quienes, en su opinión, “utilizan el sufrimiento de otros para obtener visibilidad política”. En lugar de gestos simbólicos, Meloni defendió la vía de la diplomacia como única forma responsable de actuar en el ámbito internacional.
“La verdadera responsabilidad internacional pasa por la diplomacia, no por los gestos vacíos”, enfatizó.
Meloni refuerza su alineación con el bloque soberanista
Con estas declaraciones, Giorgia Meloni reafirma su alineamiento con la derecha soberanista global y consolida su posición como figura opuesta al progresismo europeo. Su respaldo a Donald Trump, en un momento clave para la política internacional, la sitúa como una de las líderes conservadoras más visibles de Europa.








