A lomos de Inditex, Goa Invest se ha sumado al selecto club de empresas gallegas que facturan más de 1.000 millones de euros
La filial de Inditex se llama Goa Invest. Su actividad se centra en las obras que le encarga la propia multinacional y la Fundación Amancio Ortega. Y ya es la segunda constructora gallega en superar los 1.000 millones de ingresos tras elevar su facturación un 34% en 2024 y un 56% el beneficio.
A lomos de Inditex, Goa Invest se ha sumado al selecto club de empresas gallegas que facturan más de 1.000 millones de euros. Asó lo recalca Economía Digital.
La constructora del grupo de Amancio Ortega, presidida por José Manuel Queijeiro Pérez y, antes, por su padre, Manuel Queijeiro Mosquera, ha marcado un récord de ingresos. Eso le permite convertirse en la segunda empresa gallega del sector en cerrar ejercicio por encima de esa cota de 1.000 millones. La otra es San José, que acabó el pasado curso con una cifra de negocio de más de 1.500 millones.
Residencias de mayores
Goa Invest funciona de manera distinta al grupo de Jacinto Rey. Su trabajo se centra en los encargos de la propia multinacional, tradicionalmente, para el despliegue de su red de tiendas… Y en las obras de la Fundación Amacio Ortega. Es el ejemplo de las siete residencias de mayores que está levantando en Galicia. Con esos clientes, la filial de Inditex acabó el 2024 como la segunda mayor constructora gallega y una de las mayores de España por volumen de negocio.
Para lograr tales hitos, Goa Invest ha tenido que dar un salto espectacular en su facturación, como indica Economía Digital.
El año pasado alcanzó una cifra de negocio de 1.065 millones, con un avance del 34% respecto a 2023. Un año antes, en 2022, los ingresos se situaban en 543,8 millones, mientras que en 2021 eran de solamente 352,5 millones. En cuatro años, por tanto, el crecimiento fue de un 202%.
Antes de este periodo, Goa encadenó tres ejercicios a la baja (2018-2020), en los que su negocio se redujo a la mitad, hasta bajar de los 300 millones en el año del Covid. En aquel momento, el gigante textil estaba reconfigurando su red de tiendas para adaptarse a los nuevos hábitos de consumo, a un cliente multicanal que opera cada vez más de forma digital, y a un nuevo formato de establecimiento de grandes dimensiones, las llamadas flagships.
El crecimiento de la constructora de Inditex trajo consigo un fuerte incremento del beneficio. El resultado de explotación de Goa Invest se situó en los 69,2 millones, por encima de los 42,8 millones del ejercicio anterior. Las ganancias de la compañía alcanzaron los 56,6 millones, un 56% más.
