Las familias parecen haber subido a un vuelo de regreso al suelo: el endeudamiento con préstamos personales alcanza máximos históricos
Mientras Pedro Sánchez presume de que la economía española «va como un cohete», las familias del país parecen haber subido a un vuelo de regreso al suelo: el endeudamiento con préstamos personales alcanza máximos históricos, un salvavidas tóxico para un ciudadano medio que malvive entre subidas de precios y facturas impagables.
Según informa El Mundo, en octubre el saldo de préstamos al consumo de las familias superó los 113.000 millones de euros, con un crecimiento del 11% interanual, triplicando la media de financiación total en España (4%). Un repunte que, lejos de celebrar, dibuja el retrato de una clase media exprimida, priorizando compras impulsivas sobre el ahorro.
El Gobierno socialista alardea de un PIB volando alto, con desempleo en mínimos y salarios revalorizados un 3,5% en los dos primeros trimestres de 2025, tras el 4,8% en 2023 y 3,8% en 2024, superando la inflación post-pandemia del 8,4%.
Pero, como detalla El Mundo, esa bonanza macro no calienta los bolsillos de la calle y de las familias: los depósitos bancarios caen por segundo mes consecutivo, con una reducción anual de más de 14.160 millones de euros, hasta los 1.067 billones en octubre.
Supervivencia precaria
Las familias funden las subidas salariales en consumo inmediato: vehículos híbridos, reformas hogareñas o electrodomésticos… Impulsadas por tipos de interés bajos (por debajo del 7%, el mínimo en cuatro años) y una morosidad contenida. Sin embargo, el porcentaje de gasto financiado no llega al 7% del total, por debajo de los niveles pre-pandemia (7,5% en 2018-2019), lo que evidencia no un boom de prosperidad, sino una supervivencia precaria.
Expertos como María Jesús Fernández, de Funcas, intentan tranquilizar. «El empleo crece estable y el endeudamiento es manejable, por debajo del 70% de la renta disponible».
Pero las cifras de ASNEF revelan la cruda realidad: la estabilidad laboral y los tipos neutrales en la zona euro (2%) no bastan para frenar el derroche navideño, con gastos en tarjetas de CaixaBank al alza un 9,2% en noviembre, especialmente en transporte (+12%), alimentos y ocio.
El ciudadano medio: ahogado
Fuentes del sector señalan que la revalorización inmobiliaria –precios de vivienda disparados– empuja a reformar en vez de comprar, pero ¿a qué precio? El ciudadano medio, ahogado en el día a día, recurre a préstamos que triplican el ritmo de hipotecas, un récord que huele a burbuja personal.
El cohete de Sánchez ilumina las estadísticas oficiales, pero deja a España en penumbras. Y en LA BANDERA nos preguntamos cuánto durará esta fiesta de deudas antes de que explote.
Mientras Moncloa brinda por el «milagro económico«, las familias piden prestado para no hundirse. Urge un aterrizaje forzoso: políticas que prioricen el bolsillo real, no el titular rimbombante promovido por Pedro Sánchez, el Sanchismo y el PSOE.












