La Hacienda Pública sigue ahogando a los trabajadores españoles
La Agencia Tributaria continúa marcando cifras récord en la recaudación de impuestos en España. Según el último informe oficial, los ingresos tributarios acumulados hasta noviembre ya superan los 301.355 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 10%. Una cifra que previsiblemente aumentará, ya que en diciembre se concentra el último pago fraccionado del Impuesto sobre Sociedades, entre otros conceptos relevantes.
Un aumento histórico de los ingresos públicos
El objetivo marcado por el Gobierno para el cierre del ejercicio se sitúa en 325.000 millones de euros, una cantidad significativamente superior a la de años anteriores. En comparación con 2024, cuando se recaudaron 294.734 millones, el incremento es de 31.000 millones de euros. Si se toma como referencia el año 2017, con 193.951 millones, el crecimiento acumulado alcanza los 117.000 millones, lo que equivale a un aumento cercano al 70% desde que Pedro Sánchez asumió la presidencia.
Previsiones récord para 2026
Las estimaciones del Ministerio de Hacienda apuntan a que esta tendencia continuará. Para 2026, se prevé un aumento adicional del 8,5% en la recaudación, lo que permitiría superar por primera vez los 350.000 millones de euros. Estas previsiones se dieron a conocer tras la aprobación de un techo de gasto histórico de 216.177 millones, interpretado como una señal dirigida a los socios parlamentarios para facilitar la negociación de los Presupuestos Generales del Estado.
De cumplirse estas previsiones, los ingresos fiscales de 2026 serían un 80,46% superiores a los registrados en 2017.
La inflación y la no deflactación de impuestos, claves del incremento
Uno de los principales factores que explican este crecimiento es la decisión del Gobierno de no deflactar los impuestos en función de la inflación. Esta medida, conocida como “progresividad en frío”, supone en la práctica una subida de impuestos indirecta, especialmente visible en el IRPF. La falta de actualización de los tramos fiscales, que no se revisan desde 2008, ha tenido un impacto mayor tras la crisis energética y el fuerte repunte inflacionario entre 2021 y 2023.
El IRPF alcanza máximos históricos
La recaudación por IRPF hasta noviembre asciende ya a 133.282 millones de euros, superando el total del año anterior y marcando el mayor registro de la historia. Para ponerlo en contexto, en 2007 —en plena expansión económica— el IRPF aportó 72.895 millones, mientras que en 2017 apenas llegó a 77.038 millones.
Impacto directo en los contribuyentes
El Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF) ha analizado las consecuencias de la no deflactación y estima que los contribuyentes con rentas entre 25.000 y 350.000 euros han sufrido pérdidas de entre 200 y 1.500 euros, aunque en situaciones más extremas el perjuicio puede alcanzar los 25.000 euros. Además, conceptos clave del IRPF, como los mínimos personales y familiares o determinadas exenciones, han quedado desactualizados al no ajustarse al IPC.
Los expertos advierten de que, si esta situación no se corrige en 2026, los contribuyentes seguirán perdiendo poder adquisitivo, acumulando varios años consecutivos de impacto negativo sobre sus rentas.
