Cuatro magrebíes escapaban en taxi tras robar en la Barceloneta cuando a uno se le ocurrió ocultar en su boca un colgante en forma de garra
Un ladrón marroquí decidió tragarse una cadena de oro que acababa de robar con violencia en la Barceloneta (Barcelona) y casi se asfixia. El delincuente tuvo semejante ocurrencia mientras huía en un taxi junto a tres compinches, también tironeros magrebíes, poco antes de las siete de la mañana del sábado.
En un momento dado, el criminal importado decidió ingerir la cadena para ocultarla, pero se le atascó en el esófago y le impidió respirar, lo que provocó que empezara a ahogarse rápidamente. El taxista alertó de inmediato al 112 y uno de los acompañantes metió la mano en la boca del afectado para extraer el objeto que bloqueaba su garganta.
Cuando las patrullas de los Mossos d’Esquadra llegaron al paseo Marítimo de la Barceloneta, a la altura del número 35, encontraron a uno de los africanos con una cadena de oro que incluía un colgante en forma de garra recién sacado de su gaznate.
Los Mossos detienen a los tironeros magrebíes de Barcelona
Los agentes reconocieron el objeto como una de las dos cadenas que una víctima había denunciado minutos antes como robadas. Al registrar a los ocupantes del taxi, localizaron la segunda cadena entre las pertenencias del compinche que auxilió al tragón.
Las comprobaciones revelaron que los cuatro hombres, de origen magrebí, participaron en el hurto con violencia: uno dio tirones a la víctima para arrancarle las cadenas mientras los otros distraían y vigilaban el entorno, relata El Caso.
Tras conseguir el botín, subieron al taxi para alejarse antes de que la víctima alertara a las autoridades, pero el plan se frustró cuando uno tragó la cadena y casi se ahogó. Los Mossos detuvieron a los cuatro extranjeros por delitos de robo con violencia y lesiones.







