La trans colombiana amenaza con emprender acciones legales contra la actriz porno Anaís, la que se sacaba el perro y le limpiaba al socialista
Lo de Ábalos y sus ‘sobrinas’, amigas especiales, misses o prostitutas es un no parar. El exministro insiste: “Es feminista porque el socialista”. Sin embargo, presuntamente le gustaba pagar a cambio de roces sexuales. Todo un señor ‘machirulo’ o macho alfa del PSOE, como su amigo Koldo. Este último, curiosamente denunciado por presunto acoso sexual por la ‘sobrina’ Claudia Montes.
El exministro de Transportes, José Luis Ábalos, sigue en la brecha. Muchos esperan que termine en la cárcel junto a su colega Cerdán. También es el gran deseo de una gran mayoría que el cuarto ocupante del Peugeot también caiga por presunta corrupción y como líder número 1. Pero, de momento, ese es otro cantar.
Por el momento, Torrente Ábalos, como se le conoce en el mundo de las redes sociales, está en el posible ‘ajo’ de una presunta financiación ilegal del PSOE. Pero mientras tanto sus ‘amigas especiales’ sus sobrinas y sobrines, scorts de lujo, para unos, empiezan a enfrentarse en la selva mediática.
Ayer hablábamos de la que fuera Miss Asturias, que sigue dando la batalla en Cuatro. Habla incluso de amenazas de Ábalos para que cierre la boca y no cante más de lo necesario.
Anaís, la sacaperros
Otra ‘sobrina’ es Anaís, conocida como la ‘sacaperros’ o ‘escondepen’. Recordamos: una actriz porno que intentó evitar que los agentes de la UCO incautaran el célebre disco duro de Ábalos durante el registro de su casa, un gesto que tuvo en favor del socialista. “Él tenía miedo de entrar a la cárcel”, reconoció ella a La Sexta.
Otro nombre y el más espectacular a destacar en la surrealista trama es el de Valeri Cuellar, una scort transexual, para más inri antigua amante del fenómeno sexual Álvaro Muñoz Escassi.
La mujer trans, que Ábalos define como “un ser”, asegura que fue una de las mujeres colombianas a las que Ábalos contrató para una de sus noches locas a través de una agencia. Y lo hizo, dice, en tres ocasiones.
Guerra entre féminas y fémines
Valeri la está liando y las otras ‘sobrinas’ de Ábalos parece estar desquiciadas. Es una especie de guerra entre féminas y fémines. De hecho, Anaís ha cargado contra ella a través de sus redes sociales, asegurando que miente y que no tiene nada que ver con Ábalos.
Y Valeri no ha tardado en responder a Anaís en televisión. “Estoy recibiendo presión y difamación de ella. No sé si la ha puesto Ábalos o es ella la que se está metiendo en algo que no le importa, porque según lo que he visto, ella salió en una entrevista hablando mal de él y refiriéndose fatal a él, y hasta decía que le tenía miedo, y ahora le defiende…”.
Machirulismo con marca PSOE
Valeri ha ido a por todas y ha sacado a relucir el asunto del disco duro. Dice que Anaís está implicada en un turbio asunto legal que debería preocuparle, en lugar de poner el foco en ella. “Conecta lo que dices con tu cabeza y no te eches al agua tú sola, y más bien preocúpate por lo que hiciste, ayudando a guardar un disco duro, en vez de enfocarte en mí. Ella ya ha borrado todas las publicaciones en las que me difama después que me pusiera en contacto con mi abogada, y ya se encargará de esta situación mi abogada, porque en mensajes privados también siguió”, dice la mujer trans colombiana,
“Parece que le importa más el tema mío que el tema que tiene ella, que es más delicado y fuerte”, concluye.
Ábalos y sus ‘sobrinas’ siguen ‘on fine’. Auténtica telenovela colombiana o venezolana con un tique surrealista con sello machirulismo marca PSOE.








