Los datos lo confirman: España vive el mayor boom de sarna de su historia reciente. Una enfermedad que antes apenas aparecía en consultas y que ahora se ha multiplicado por 50 en apenas una década. Y lo peor: afecta sobre todo a jóvenes y se expande rápido en hogares, residencias y centros sanitarios.
El estudio, elaborado por el Instituto de Salud Carlos III y publicado en Eurosurveillance, advierte de un aumento “muy significativo” que ya preocupa a los epidemiólogos. Algo está pasando… y no es menor.
Crece a un ritmo brutal: de 131 casos a más de 6.300 por millón
La cifra habla por sí sola. En 2011 los médicos de atención primaria registraban 131 casos por millón. En 2023 el dato supera los 6.300.
Un salto que convierte una enfermedad residual en un problema epidemiológico de primer orden.
También aumentan:
- Las admisiones hospitalarias
- Los brotes laborales
- Los contagios en residencias
- Los casos en jóvenes de 15 a 24 años, el grupo más afectado
La sarna ya no es “algo raro”. Es una infección que está explotando entre la población.
¿Qué es la sarna y por qué se contagia tanto?
La enfermedad está causada por un ácaro parasitario —Sarcoptes scabiei— que excava túneles en la piel y pone huevos.
El contagio es rapidísimo cuando hay contacto directo piel con piel, o a través de objetos infestados como ropa de cama, pijamas o toallas.
Los síntomas más comunes son:
- Picor intenso, peor por la noche
- Erupciones muy molestas
- Lesiones que pueden infectarse
- Insomnio
- En casos graves: fiebre reumática y complicaciones renales
La OMS calcula que más de 200 millones de personas la padecen en algún momento de su vida.
Hogares, residencias y hospitales: los tres focos del brote
Los datos de RENAVE apuntan a tres contextos clave donde la enfermedad corre como la pólvora:
1. Hogares
El contagio familiar es muy alto, especialmente cuando conviven varias personas.
2. Residencias de ancianos
Son el foco donde más brotes se generan, por vulnerabilidad, contacto y convivencia.
3. Entornos sanitarios
Aquí se dan los brotes más graves: más casos, más duración y más bajas laborales.
De hecho, el 82% de las bajas por sarna proceden del sector socio-sanitario.
Las zonas más afectadas en España
Islas y regiones costeras del norte registran los mayores incrementos. Los investigadores apuntan a posibles causas:
- Humedad
- Cambios climatológicos
- Densidad poblacional
- Variables ambientales que favorecen la supervivencia del ácaro
Está por confirmarse, pero el patrón se repite año tras año.
El estigma complica el diagnóstico
Uno de los frenos más grandes es el tabú. La sarna se asocia erróneamente con poca higiene, lo que retrasa el diagnóstico y facilita que la persona contagie a más contactos.
Los investigadores reclaman más:
- Información
- Prevención
- Formación a sanitarios
- Comunicación clara para evitar el estigma
Porque, hoy por hoy, la enfermedad crece más rápido de lo que se detecta.












