El candidato a la presidencia de la Comunidad Valenciana, en su intervención inicial, ha apelado a la «unidad valenciana» por encima de ideologías
En un movimiento estratégico para consolidar su mayoría en las Cortes Valencianas, el candidato del Partido Popular a la presidencia de la Generalitat, Juanfran Pérez Llorca, ha integrado por completo las demandas clave de VOX en su programa de investidura.
Esta decisión, revelada durante el debate que se celebra hoy en el hemiciclo valenciano, busca, como apunta ABC, asegurar el respaldo de la formación de Santiago Abascal.
Pérez Llorca, un perfil discreto pero con experiencia en la gestión local, ha optado por un discurso que prioriza la reconciliación y la acción inmediata. Sus primeras palabras como posible presidente están dedicadas a pedir perdón a las víctimas de la riada. «Es hora de mirar al futuro con humildad y determinación«. Al mismo tiempo, ha evita cualquier mención explícita a su predecesor, Carlos Mazón, cuya gestión durante la catástrofe sigue siendo duramente criticada.
Pacto Verde e inmigración
El núcleo del programa incorpora las “líneas rojas» de VOX. Es decir, un rechazo frontal al Pacto Verde Europeo, al que Pérez Llorca califica de «imposición ideológica que asfixia nuestra economía».
En materia de inmigración, promete endurecer las políticas contra la entrada ilegal, priorizando la deportación de irregulares y reforzando fronteras.
En el ámbito energético, defiende con vehemencia la nuclear como pilar de la transición ecológica, argumentando que «sin ella, el apagón es inevitable». Finalmente, en respuesta a la DANA, exige la ejecución inmediata de obras hidráulicas pendientes, como el trasvase Júcar-Vinalopó, para prevenir futuras inundaciones.
Este alineamiento con VOX no ha estado exento de controversia. Fuentes del PP regional aseguran a ABC que se trata de un «matrimonio de conveniencia» para alcanzar los 61 escaños necesarios. La suma es de 40 del PP y 13 de VOX.
Triunfo de las ideas sensatas
Críticos internos del PP, dice ABC, temen que esta cesión diluya el perfil moderado del partido, mientras que VOX celebra el «triunfo de las ideas sensatas» en un comunicado oficial.
Si Pérez Llorca logra la investidura, prevista para esta tarde, asumiría el cargo el próximo lunes, marcando el fin de una legislatura marcada por la crisis climática y la fragmentación política.
Analistas consultados por ABC vaticinan un gobierno de coalición inestable, con tensiones latentes en temas como la memoria histórica y los derechos LGTBI. Pero en un contexto nacional de auge de la derecha, esta alianza podría inspirar pactos similares en otras regiones. De hecho, Pérez Llorca, en su intervención inicial, ha apelado a la «unidad valenciana» por encima de ideologías.








