El agresor con ‘extenso historial de conductas violentas y de carácter sexual’ dentro de la prisión, estaba en un módulo con presos de buen comportamiento
Los sindicatos de funcionarios de prisiones alzaron la voz contra el Ministerio del Interior tras la agresión sexual sufrida por una psicóloga en el centro penitenciario de Sevilla II el pasado martes por parte de un preso reincidente en ese tipo de crímenes.
El sindicato TAMPM (Tu Abandono Me Puede Matar) criticó que el interno implicado en estos hechos tenía «antecedentes violentos y contra la libertad sexual dentro de prisión», lo que no impidió que estuviera ubicado en un módulo de respeto, teóricamente reservado para internos con buen comportamiento.
En un módulo con presos de buen comportamiento
«La funcionaria, psicóloga de prisiones, realizaba entrevista en un módulo de los llamados de respeto, en uno de los despachos contiguos a la zona de reparto de comedor, cerca de la entrada al departamento», indicó el sindicato.
«En el curso de la misma, cuando la entrevista finalizaba, el interno le coge por el cuello, le intenta estrangular con el brazo y le arrastra por los pelos y le pega mientras la fuerza, colocándola tumbada en una camilla en la habitación y la frota con ánimo obsceno en zonas íntimas, mientras trata de mantenerla callada tapando su boca», explica TAMPM.
Desde TAMPM denunciaron que «No es un hecho aislado ni fortuito, sino una situación previsible y evitable, con la que se convive en las prisiones españolas sin que se tome medida alguna a pesar de ser una demanda de este sindicato desde hace años».
‘En el último año, al menos tres agresiones sexuales y múltiples casos de acoso a trabajadoras’
Por su parte, ACAIP-UGT calificó de «incomprensible» que, pese a su historial , la dirección de la cárcel alojara a este recluso en un módulo destinado a internos con buena conducta. «Este individuo acumula un extenso historial de conductas violentas y de carácter sexual, incluyendo agresiones a funcionarios, masturbaciones públicas y exhibicionismo frente a trabajadoras», señalaron.
«En el último año, en Sevilla II se han registrado al menos tres agresiones sexuales y múltiples casos de acoso a trabajadoras, sin que desde la Administración Penitenciaria se haya articulado una respuesta eficaz. La inacción institucional ha normalizado un escenario laboral de riesgo».








