Un tuit, un kit de cocina y una avalancha de usuarios que no quieren perder su oportunidad
Lo que empezó como un simple sorteo en el perfil oficial de Lidl España se ha convertido en una locura viral. En solo tres días, la publicación supera las 137.000 visualizaciones y más de mil interacciones, con miles de usuarios compitiendo por hacerse con el famoso “kit de cocina” que la cadena ha puesto en juego.
El mensaje era simple: “¡Si da gusto verlo, imagina usarlo!”. Pero el efecto fue inmediato. Miles de comentarios inundaron el post y, como suele ocurrir, no todos llegaron a tiempo. Muchos usuarios se quejan de que el sorteo ha “explotado” y temen quedarse fuera del plazo o no cumplir todos los pasos a tiempo.
El fenómeno “me lo quitan de las manos” digital
No es la primera vez que un sorteo de Lidl genera este tipo de reacción, pero lo de esta semana ha roto todas las métricas.
Lo curioso es que el sorteo no ofrece dinero ni viajes, sino electrodomésticos básicos: una freidora de aire, una batidora de mano, una tostadora, una kettle y un picador.
Y sin embargo, el público lo ha interpretado como el kit definitivo del ahorro moderno: cocinar sano, barato y rápido.
“Literalmente, necesito esto para sobrevivir a final de mes”, comenta una usuaria en X.
Miles de españoles participando en tiempo récord
El tuit de @lidlespana, publicado el 5 de noviembre, detalla las reglas: seguir la cuenta, dar like, comentar, repostear y usar un hashtag.
Sencillo, pero suficiente para que se desatara una avalancha digital.
En apenas horas, el post se coló entre las tendencias del día, con usuarios compartiendo capturas, memes y trucos para “aumentar las probabilidades” de ganar.
Algunos incluso aseguran que no pueden repostearlo más porque X les ha bloqueado temporalmente la opción por exceso de actividad.
“No es solo un sorteo, es una batalla campal digital”
El fenómeno recuerda a los grandes sorteos virales de TikTok y Twitter, donde las marcas consiguen una visibilidad descomunal con una mínima inversión.
Pero esta vez, la conversación ha ido más allá: el tuit se ha convertido en un espejo del momento económico actual.
Cientos de usuarios destacan el contraste: una avalancha de participación por un kit básico de cocina en un país donde el precio de la cesta de la compra no deja de subir.
“Antes soñábamos con un coche, ahora con una freidora de aire”, ironizaba un usuario.
Cronómetro en marcha: la gente teme quedarse fuera
Aunque Lidl no ha especificado la fecha exacta del cierre del sorteo, los comentarios reflejan una sensación de urgencia extrema.
Muchos usuarios están dejando mensajes como “ya participé, pero por si acaso vuelvo a comentar” o “¿cuándo se acaba esto?”.
Otros denuncian la aparición de cuentas falsas que imitan el perfil de la marca para intentar estafar a los participantes, algo que ya se ha vuelto habitual en grandes virales.
La receta perfecta: emoción, urgencia y deseo
El sorteo de Lidl ha demostrado de nuevo la fuerza del marketing emocional cuando se combina con simplicidad, utilidad y oportunidad.
Y aunque solo unos pocos se llevarán el premio, el resto ha dejado clara una cosa: el FOMO (miedo a quedarse fuera) es el ingrediente secreto de cualquier éxito en redes.








