La administración republicana ha denunciado las matanzas contra los cristianos mientras el gobierno del país no hace nada
La Administración Trump ha decidido endurecer su postura frente a la creciente violencia contra comunidades cristianas en Nigeria, calificando la situación como “una vergüenza” y advirtiendo que podría suspender la ayuda financiera al país africano. El expresidente ha expresado públicamente su profunda indignación por los continuos ataques y la falta de respuestas efectivas por parte del Gobierno nigeriano.
Washington presiona a Nigeria para que actúe
El Secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, se reunió recientemente con el asesor de seguridad nacional nigeriano, Nuhu Ribadu, para trasladarle la advertencia de la Administración Trump: si Nigeria no toma medidas contundentes para frenar la violencia, perderá los subsidios y apoyos estadounidenses.
Trump fue directo en sus declaraciones:
“Vamos a terminar cortándoles las ayudas. El Gobierno no ha hecho nada. Matan a cristianos cuando quieren”, afirmó.
Hegseth insistió en que Nigeria debe demostrar un compromiso real y adoptar acciones urgentes y sostenidas que garanticen la protección de los cristianos en su territorio.
Secuestro masivo de estudiantes mantiene la alarma internacional
La preocupación internacional crece mientras más de 250 estudiantes continúan secuestrados tras el ataque de un grupo armado integrado por más de 60 hombres contra la Escuela Católica St. Mary de Papiri, en el estado nigeriano de Níger.
Solo 50 jóvenes lograron escapar y ya se han reunido con sus familias.
La ola de violencia y los constantes secuestros han puesto a Nigeria en el centro de la atención global, y Estados Unidos exige respuestas inmediatas antes de mantener cualquier tipo de ayuda.







