Desastre liderado por el comercio que solo en julio ha cerrado 1.300 negocios; solo las grandes empresas crean empleo neto
Nuevo verano del Sanchismo, el de 2025. Calor y desastre para autónomos, pymes y pequeños comercios. De hecho, solo el mes de julio significó la pérdida de 235 autónomos cada día, para una caída total de 7.286 autónomos en el conjunto del mes.
La situación negativa se concentra únicamente en nueve comunidades autónomas, que acaparan el 90% de los nuevos afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). La Comunidad Valenciana, Andalucía, Comunidad de Madrid y Cataluña las que más emprendedores suman.
Pese al incremento del empleo en el mes en 4.408 cotizantes, los autónomos y microempresas siguen siendo las grandes perdedoras de empleo.
Asfixia fiscal
En junio de 2025 se contabilizaron 65.000 cuentas de cotización menos que en junio de 2019, lo que desde ATA atribuyen a que “se han perdido muchos empleadores en el ámbito de las pequeñas empresas y de los autónomos, que siguen viviendo una asfixia fiscal y burocrática con unos costes inasumibles. Para los autónomos y las pymes se está haciendo un mundo mantener el empleo, ya no hablo de crearlo, sino de mantenerlo”, alertó su presidente, Lorenzo Amor. Así lo recoge La Razón.
Especialmente grave es la situación del comercio, que ha perdido más de 14.000 autónomos en el último año. Por ello, UPTA advierte de que el sector minorista es una especie en extinción tras perder casi 1.300 trabajadores por cuenta propia en julio y sin solucionar el relevo generacional, un problema para la que su presidente, Eduardo Abad, reclama soluciones.
Políticas de relevo generacional
“Necesitamos poner sobre la mesa políticas de relevo generacional que ayuden a combatir esta problemática. No podemos hablar de sostenibilidad en el trabajo autónomo sin mirar de frente a lo que está ocurriendo en sectores como el comercio y actuar ahora antes de que el daño sea irreversible”, apunta a La Razón.
Para Abad, la desaparición del comercio “no es coyuntural ni estacional”, sino que “es el resultado de una combinación de factores que hacen que los pequeños negocios sufran una caída generalizada desde hace años”.








