La Eurocámara reconoce oficialmente que las obligaciones del Pacto Verde, aprobado en 2019, han estrangulado a las pequeñas y medianas empresas
VOX está dando pasos agigantados en España y en Europa en pro de un futuro próspero para la ciudadanía frente a una ‘ideología verde’ que esclaviza el sector industrial y el rural.
Así, en un giro histórico que resquebraja el consenso ambiental de la Unión Europea, el Parlamento Europeo ha aprobado hoy el denominado ‘Informe Frías’, impulsado por el eurodiputado de VOX, Jorge Martín Frías.
Este documento, que denuncia la «transición verde» como una vía para empobrecer el continente, representa el primer paso formal hacia la revisión o incluso el derrocamiento del controvertido Pacto Verde Europeo. La votación, con una mayoría alternativa que incluye al PPE y grupos conservadores, ha sido celebrada por VOX como una victoria contra el «intervencionismo asfixiante» de Bruselas.
El informe, elaborado en el marco de la comisión de Economía y Moneda, analiza el acceso a la financiación de las pymes europeas. Por primera vez, la Eurocámara reconoce oficialmente que las obligaciones del Pacto Verde, aprobado en 2019, han estrangulado a las pequeñas y medianas empresas. Estas representan el 99,8% del tejido empresarial de la UE y generan más del 65% del empleo.
Regulaciones verdes como freno a la inversión
Según datos citados en el texto, un 60% de los inversores señala directamente las regulaciones verdes como un freno a la inversión, con cargas burocráticas que elevan costes y desalientan la innovación.
«Durante años, las políticas pactadas entre populares y socialistas han impuesto un modelo que frena el crecimiento y castiga a los creadores de empleo«, denunció Martín Frías tras la aprobación, que se impuso con 402 votos a favor frente a 250 en contra.
VOX, a través de su delegación liderada por Jorge Buxadé, no se ha conformado con la crítica. El informe propone un cambio de paradigma: reindustrializar Europa priorizando la soberanía energética y productiva, en lugar de «prohibiciones ideológicas».
Frente a la ciénaga de Bruselas
Entre las medidas clave figuran la eliminación de trámites redundantes, la movilización del ahorro europeo para financiar empresas locales –no fondos extranjeros–, incentivos fiscales para la inversión ciudadana en pymes y la garantía de competencia entre Estados miembros, frente al centralismo de la Comisión Europea. «Hay que derogar todo el Pacto Verde. Hoy hemos dado pasos hacia adelante«, exclamó Buxadé, reiterando el plan de VOX para devolver el poder a las naciones y acabar con la «ciénaga de Bruselas».
La aprobación ha generado reacciones encontradas. Mientras los Verdes y socialdemócratas la tildan de «alianza con la ultraderecha» que desmantela la lucha contra el cambio climático, el PPE justifica su apoyo en la necesidad de «sentido común» para proteger empleos.
Una Europa de la libertad y la prosperidad
Fuentes de la Comisión Europea advierten de que este informe no implica una derogación inmediata, pero abre la puerta a enmiendas en futuras directivas, como la ya debilitada contra la deforestación.
Este hito llega en un contexto de creciente escepticismo hacia la Agenda Verde, impulsado por la presión de la derecha europea. Tras retrasos en normas clave y el impacto de crisis energéticas, el debate se centra en si la transición ecológica es un lujo que Europa no puede permitirse.
Para VOX, es el comienzo de una «Europa de la libertad y la prosperidad«, donde la reindustrialización impulse el PIB sin sacrificar el medio ambiente a expensas de la economía. El informe, ahora en fase de implementación, podría redefinir el futuro de la UE en los próximos meses.








