Tras mantener relaciones sexuales consentidas, discutió con la víctima, le propinó una paliza salvaje y la ahogó
La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a 12 años de prisión por homicidio a un senegalés por el salvaje asesinato de una mujer en Roquetas de Mar durante la madrugada del 8 de enero de 2023.
El cadáver de la víctima del emigrante senegalés, una mujer de 43 años, presentaba múltiples signos de violencia, desde un estrangulamiento mortal, hasta lesiones internas, escoriaciones y hematomas.
Durante el juicio, el senegalés reconoció de forma íntegra los hechos imputados por la Fiscalía. Aunque afirmó haber consumido drogas y alcohol aquella noche, los agentes de la Guardia Civil que lo arrestaron en el lugar de los hechos —junto al cadáver de su víctima— no detectaron signos de intoxicación, ni se presentó prueba alguna que acreditara tal consumo.
Discutieron tras mantener relaciones sexuales y el asesino la golpeó antes de estrangularla
El jurado popular consideró probado que el asesino se dirigió al domicilio de la víctima y ambos mantuvieron relaciones sexuales consentidas. Tras ese encuentro, se inició una discusión.
El asesino entonces comenzó a golpear a la mujer, propinándole varios puñetazos en el rostro y golpes en distintas partes del cuerpo. La víctima gritó, pero sus súplicas no lograron frenar la agresión.
El ciudadano senegalés, consciente de su superioridad física, la sujetó del cuello con fuerza usando ambas manos y presionó hasta causarle la muerte.
Los forenses que realizaron la autopsia enumeraron múltiples lesiones, como equimosis en la zona cervical, hemorragias internas, la rotura parcial del cartílago tiroides y evidencias claras de presión manual directa en el cuello.
La víctima de Roquetas de Mar tenía un hijo un menor que dependía de ella
El tribunal, basándose en el veredicto emitido por el jurado, subrayó en la sentencia que el acusado, sin antecedentes penales y con residencia legal en España, “actuó con un claro ánimo de matar”, plenamente consciente de sus acciones, sin que existiera circunstancia atenuante alguna que disminuyera su responsabilidad penal.
Según recoge el ‘Diario de Almería’, la víctima tenía 43 años y era madre de un menor de edad que vivía con ella y dependía económicamente de su trabajo. La sentencia obliga al acusado a indemnizar al menor con 150.000 euros.
Tras cumplir la pena de prisión, el asesino permanecerá bajo libertad vigilada durante ocho años más.
