Utilizó la tradicional cena de Navidad para lanzar Laporta duras acusaciones contra el Real Madrid y su presidente, Florentino Pérez
En un ambiente festivo pero cargado de tensión, el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, utilizó la tradicional cena de Navidad del club para lanzar duras acusaciones contra el Real Madrid y su presidente, Florentino Pérez.
Ante las plantillas de todas las secciones profesionales y sus equipos técnicos, Laporta no escatimó en palabras para denunciar lo que considera una campaña sistemática de desinformación por parte del eterno rival.
Durante su discurso, Laporta afirmó que el buen momento deportivo del Barcelona está generando «muchas envidias»… Y acusó directamente al Real Madrid de «vomitar mentiras e intoxicar de manera constante y permanente».
El bodrio del Real Madrid TV
Calificó a Real Madrid TV como un «bodrio» y criticó al club blanco por «confundir el poder con el despotismo no ilustrado», actuando con una «prepotencia tan desmesurada como alucinante».
Estas declaraciones, que recoge Infobae, se enmarcan en la larga rivalidad entre los dos gigantes del fútbol español, exacerbada recientemente por polémicas como el caso Negreira.
Laporta hizo referencia implícita a este escándalo arbitral, defendiendo la integridad del Barcelona y negando cualquier irregularidad. En una entrevista reciente en TVE, grabada en noviembre y emitida este mes, el presidente blaugrana insistió: «En Madrid se respira poder, en el Barça libertad«.
Compra de árbitros
Aseguró además que el club ha aportado pruebas de informes existentes y rechazó las acusaciones de compra de árbitros, afirmando que «nadie más ha aportado pruebas de que hayamos comprado árbitros, porque no ha sucedido».
El mandatario culé advirtió a los presentes que no permitirá que continúen «este tipo de maniobras» destinadas a «desvirtuar la historia del club».
En un tono optimista, Laporta subrayó que el Barcelona «vuelve a estar fuerte, dentro y fuera de los terrenos de juego», y que está construyendo «una etapa esplendorosa» para «tocar la gloria y hacer historia».
Hizo un guiño a las próximas elecciones presidenciales, expresando su deseo de «seguir viéndoos las próximas Navidades aquí celebrando los éxitos del Barça».
Guerra dialéctica
Este episodio intensifica la guerra dialéctica entre Barcelona y Madrid, en un momento en que el Barça busca consolidar su competitividad en todas las disciplinas.
Laporta cerró su intervención con un enfático «Visca el Barça y visca Cataluña«, reafirmando los valores del club y su unidad frente a las adversidades externas.
La cena, más allá de las celebraciones, se convierte así en un recordatorio de que la rivalidad trasciende el campo de juego, afectando las esferas institucionales y mediáticas.












