La intención de la Comisión Europea es que se logren aumentar hasta el 90% la reducción de emisiones contaminantes
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha cedido ante la presión del grupo de Los Verdes en el Parlamento Europeo (PE) y endurecerá las normativas climáticas de la Unión Europea, a pesar de la creciente oposición de varios Estados miembros.
Se trata de una promesa que la presidenta Ursula Von der Leyen hizo el año pasado al partido ecologista para asegurar su apoyo en su reelección al frente de la Comisión Europea, tal y como ha adelantado La Gaceta.
El grupo de Los Verdes, que cuenta con 53 eurodiputados de los 720 que conforman el Parlamento, ha exigido la implantación de objetivos “claros y obligatorios” que los Estados miembros deberán cumplir para el año 2040.
Los Verdes son solo el sexto grupo más grande. Pero su influencia en Europa es muy destacable, a pesar de la presencia de mayor grupos y parlamentarios europeos conservadores en la Unión.
La Ley Europea del Clima, que incorpora los objetivos del Pacto Verde Europeo, establece que el continente debe alcanzar la neutralidad climática para 2050, con una reducción de emisiones del 55% para 2030 en comparación con los niveles de 1990.
La Comisión Europea, con Ursula a la cabeza, ha propuesto ahora un nuevo objetivo intermedio: reducir las emisiones al menos en un 90% para 2040. De aprobarse, estos objetivos serían de obligado cumplimiento para todos los países miembros.
Fuentes renovables
Además de estos objetivos, la Unión Europea pretende que el 42,5% del consumo energético provenga de fuentes renovables en 2030.
También busca continuar la descarbonización del sector industrial mediante la ampliación del uso de energías renovables y la producción de baterías, bombas de calor y vehículos eléctricos, señala La Gaceta.
Patriotas por Europa
Pero muchos Estados miembros critican el Pacto Verde Europeo de Ursula: ha generado incrementos fiscales y cargas adicionales para empresas y agricultores. También se culpa a estas políticas del aumento en los precios de la energía y de haber reducido la competitividad de la UE en el mercado global.
El grupo soberanista Patriotas por Europa ha instado recientemente a los partidos de derechas del Parlamento Europeo a unirse para desafiar el Pacto Verde, proponiendo “acciones rápidas, masivas y concretas” para proteger a las empresas y a los consumidores.








